BALCARCE (Corresponsal)-. La última sesión del Concejo Deliberante local quedó marcada por la grieta que divide a los argentinos políticamente en esta época moderna.

La posibilidad de expropiación que baraja el gobierno nacional sobre la cerealera Vicentín puso a los dos sectores políticos más populares nuevamente frente a frente.

Desde el Frente de Todos buscaban declarar de interés legislativo el “rescate” del grupo dedicado a la producción, comercialización y exportación de productos alimenticios. Sin embargo, desde el bloque oficialista local -con mayoría en el recinto- rechazaron de plano la propuesta y en la voz del edil Sebastián Pinilla se puso foco en lo “desacertada” que sería la medida.

“Ya vimos lo que hace el Estado cuando interviene una empresa. Creemos que hay maneras más sanas y menos perjudiciales para mantener una empresa viva y generando empleo”, sostuvo.

Pinilla agregó que: “entendemos que lo más preocupante es qué harán con sus empleados. Por eso bregamos por una posible salida a través de la convocatoria de acreedores, para que se forme una nueva empresa o una Cooperativa, pero nunca a través de un interventor de un partido político que poco debe saber del negocio agroalimentario”.

El concejal aseguró que “no encontramos la forma de adherir al proyecto y no encontramos la manera de no repudiar la medida del gobierno nacional”.

En tanto, consideró que “el Gobierno no hace más que ponerle los pelos de punta a un sector al que los gobiernos kirchneristas ya se encargaron de pisarles la cabeza”.

En este marco, el edil recordó que “sabemos lo que ha pasado con el rescate de empresas a través del Estado. Vendimos regaladas Aerolíneas Argentinas e YPF y después las rescatamos a un valor mucho más caro que cuando las entregamos”.

-Defensa

El concejal del Frente Cumplir y hombre ligado al sector productivo, Eugenio Gardella, respondió a las declaraciones vertidas por Pinilla: “el repudio excede las diferencias y el respeto”.

A su turno, su par de bancada José Luis Pérez pidió clarificar la situación y no confundir a la gente al solicitar “ser prolijos con el vocabulario”.

El ex intendente reconoció que “la decisión del Gobierno sacó a la superficie claras contradicciones con las que convivimos los argentinos. Argentina es uno de los países donde se funden las empresas y no los empresarios. Muchos empresarios son liberales para las ganancias y socialistas para las perdidas. Cuando pierden acuden a que el Estado los ayude y cuando ganan dicen que el Estado no debe meterse”.