El secretario de Hacienda, Hernán Mourelle, fue nuevamente increpado por cooperativistas en las inmediaciones del Palacio Municipal y debió recurrir a personal policial para evitar que la situación llegara a mayores.

El hecho ocurrió esta mañana en Yrigoyen y Luro, cuando el funcionario, que se encontraba acompañado por el doctor Andrés Barbieri, se disponía a salir del edificio. En ese momento fue sorprendido por integrantes de la cooperativa Nueva Esperanza, que se encuentran desde ayer reclamando por el pago de trabajos realizados.

Con empujones, insultos e incluso patadas, el secretario intentó hacerse lugar entre los hombres y mujeres que le exigían respuestas, pero al ver que la tensión iba en aumento, personal policial acudió en ayuda y “cercó” al funcionario y sus acompañantes para evitar la agresión física.

“¿Por qué no nos das una explicación y punto?”, “Tenemos hijos, ¿vos no tenés hijos? No estamos reclamando una locura”, fueron algunas de las frases dirigidas por los manifestantes y que pueden escucharse en el video realizado por la periodista Valeria Paula.

Con el cese de los empujones, y con Mourelle ya a salvo en el cerco realizado por los oficiales, uno de los  hombres que se encontraban reclamando le dijo: “La gente tiene que comer. Vos tenés famila, tenés hijos, ¿no necesitás plata para que ellos coman? Sincerate con nosotros y decí que no tenés un mango y hagamos un acuerdo nuevo. Pero hagamos un acuerdo que nos sirva a todos, no estamos en contra de eso”.

A unos pasos, y a tan solo centímetros de Mourelle, Paola Tournoud, referente del espacio, le pidió con lágrimas en los ojos: “Vos vas a pagarle a la gente, voy a hacerte la denuncia”.

Tras un acuerdo establecido entre los agentes de la Policía, el secretario, que estuvo durante todo momento callado, se retiró del lugar y volvió a ingreso al edificio municipal.

Vale destacar que este es el segundo encuentro de estas características que Mourelle mantiene con los cooperativistas. Ayer, en el marco de la comisión de Educación del Concejo Deliberante en el que se analizaba el conflicto con los docentes municipales, el secretario debió refugiarse en el despacho del intendente luego que los cooperativistas lo increparan violentamente en el  hall municipal.