El próximo lunes, luego de Semana Santa, un grupo de enfermeros y enfermeras del Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) iniciará un acampe frente al nosocomio en reclamo de una recomposición salarial, un bono, recategorizaciones y días de descanso frente al agotamiento y al “bajo ingreso” que perciben desde hace tiempo, realidad agravada en el marco de la pandemia.

“Hace unos meses éramos héroes, trabajadores esenciales, pero hoy nadie nos reconoce y no se nos da nada de lo que pedimos hace meses”, expresó Fernanda Tapia, enfermera del HIGA, en diálogo con LA CAPITAL, en representación de los profesionales de la salud que sostienen el reclamo.

El personal de enfermería comenzó a movilizarse con los mismos reclamos en septiembre de 2020, en el pico de la pandemia en la ciudad. Hubo marchas, abrazos solidarios al Hospital y demás acciones de protesta con carteles que decían “Enfermería le pone el cuerpo a la pandemia por $39.000”. También advertían que en sus recibos de sueldo no figuran como “profesionales” sino como técnicos y los salarios, en algunos casos, son inferiores o equiparan al de un empleado de comercio.

Los meses pasaron, se desarrolló la temporada y hoy, en el inicio de la segunda ola de coronavirus, “seguimos exactamente igual o peor”.

“Cobramos por debajo de la canasta básica. La recategorización que pedimos hace cinco meses y el reencasillamiento nunca se nos otorgó. Trabajamos con una carga psíquica enorme y encima nos dieron 12 días de licencia extraordinaria, porque se prorrogaron las vacaciones, en dos cuotas, es una cargada”, expresó la enfermera.

Los reclamos apuntan al Gobierno de la Provincia de Buenos Aires. De no haber respuesta en el transcurso del fin de semana largo de Semana Santa, “ya se aprobó en asamblea que desde el lunes iniciaremos un acampe frente al Hospital”.

“El viceministro (Nicolás) Kreplak dijo que desconocía nuestro reclamo, cuando hace meses le entregué en mano el petitorio al gobernador Axel Kicillof y al ministro Daniel Gollan. Es indignante que no nos reconozcan”, sostuvo.

Respecto a la medida de fuerza, que se llevará a cabo -por ahora- sin respaldo gremial sino en forma autoconvocada, Tapia aclaró: “No queremos hacerla. No queremos dejar a nuestras familias y estar en una carpa. Pero no nos escuchan. De todos modos no vamos a hacer abandono de paciente. Jamás lo haríamos. Habrá guardias mínimas y enfermeros en todos los pisos, pero con muchos compañeros estaremos acampando si no hay respuestas antes del lunes”.

El reclamo, aclaró, apunta a la dirección del HIGA, sino que “se trata de una deuda pendiente que hace tiempo el Estado tiene con los trabajadores de salud” que se vio agravada durante los últimos meses de pandemia, escenario en el que “las patologías preexistentes persisten, no es todo Covid”.

“Exigimos que nos den un bono, pero no en cuotas. Queremos un salario digno. No queremos el pluriempleo, pero la mayoría tenemos que tener dos trabajos porque nuestro ingreso no nos alcanza”, agregó la enfermera.