Este año la marcha del #NiUnaMenos tuvo una versión digital en todo el país y una imposibilidad de realizarse de manera física, pero pese a esto familiares de Lucía Pérez realizaron una convocatoria por las calles de la ciudad.

El encuentro reunió a un grupo reducido de personas que, no obstante, se movilizó desde Tribunales hasta el Monumento al General San Martín, trayecto en el cual se mostraron consignas que visibilizan la problemática de la violencia de género y el maltrato hacia la mujer.

Según señaló la integrante del Movimiento de Mujeres y Diversidad de Mar del Plata y Batán, la activista Laura Hochberg, la violencia se profundizó durante la cuarentena. “Entendemos que el aislamiento agravó la situación de violencia que sufrimos las mujeres ya que convivir con el agresor las 24 horas del día agrava esa violencia, no solamente a la mujer sino también de sus hijos e hijas. Lo mismo con las compañeras travestis y trans”, señaló.

Y agregó: “Las cifras son alarmantes, más de 50 asesinatos. El hogar es el lugar más seguro para enfrentar el virus pero no la violencia machista”. Los números difundidos por la Corte Suprema la respaldan: en 2019, 7 de cada 10 femicidios tuvo lugar en la casa de la víctima.

En este sentido, Hochberg recordó que “se puede salir de la casa para ir a denunciar un hecho de violencia” e instó a quien necesite, comunicarse con las líneas de asistencia y organizaciones de la ciudad.

Además, y en cuanto a los planos locales, desde el Movimiento ponen el foco en Mar del Plata y Batán reclamando al Ejecutivo local que se “haga presente ante las problemáticas denunciadas”. Cumplimiento de la emergencia en violencia de género, acompañamiento a las familias víctimas de femicidios, más presupuesto para más políticas y cupo laboral travesti-trans, fueron solo algunos de los puntos exigidos.

“Si bien han aumentado los femicidios, desde el Ni Una Menos de 2015 hasta esta parte también aumentó la conciencia por parte de mujeres y varones en relación a la violencia de género. Esto es porque los feminismos hemos logrado hacerlo visible y hemos logrado que las mujeres puedan contar, sin vergüenza, lo que sucede puertas para adentro”, destacó Hochberg. Y concluyó: “hoy no solo hay más organizaciones, hay también instituciones que bregan por nuestros derechos y a las que se puede llegar con más facilidad. En cinco años se logró un gran avance“.

Lucía Pérez murió en octubre de 2016 en el interior de la vivienda de un vendedor de drogas, Matías Farías. La causa del deceso no pudo ser verificada con unanimidad por los peritos, quienes tampoco acreditaron el abuso sexual. La fiscalía, representada por Daniel Vicente, había solicitado que por el contexto de vulnerabilidad de Lucía, de 16 años, se dé por probado el abuso sexual seguido de muerte.

El Tribunal Oral y Criminal N°1 se respaldó en la cuestión científica y rechazó el femicidio y el abuso sexual, y solo condenó por venta de drogas a Farías y a su amigo Juan Pablo Offidani. El fallo provocó rechazo en una gran parte de la sociedad y en la actualidad se encuentra bajo revisión en la Cámara de Casación penal.