Así lo resolvió el Tribunal de Trabajo N°1 de esta ciudad en el marco de la demanda iniciada por dos camioneros que adujeron haber sido despedidos sin causa. La firma argumentó que eran transportistas temporales con camiones propios. Pero la Justicia laboral falló a favor de los trabajadores.
El Tribunal de Trabajo Nº1 de esta ciudad condenó a una empresa logística a pagar un monto cercano a los 700 millones de pesos al cabo de una demanda iniciada por dos camioneros que accionaron por reclamar que habían sido despedidos sin una causa justa.
La sentencia fue por una causa por despido directo sin justa causa y la empresa demandada es TASA Logística S.A. que deberá afrontar una reparación millonaria para dos choferes de larga antigüedad en la distribución de bebidas. La condena, que incluye actualización e intereses, asciende a $494.852.094,95, y a esa cifra se le suman costas procesales ya reguladas que superan los $149 millones, con lo que el total reconocido judicialmente supera los $640 millones.
La causa se originó a partir de la desvinculación de dos choferes que desarrollaban tareas de transporte para la firma desde octubre de 2005 y octubre de 2004, respectivamente, en la distribución de cerveza en Mar del Plata. Si bien operaban con vehículos propios, el Tribunal consideró acreditado que existía relación de dependencia, debido a órdenes diarias, zonas asignadas y control operativo ejercido por la empresa.
El conflicto estalló en junio de 2023, cuando Cervecería y Maltería Quilmes reemplazó a TASA como distribuidora. El 21 de junio de 2023, ambos conductores fueron despedidos y recibieron pagos parciales que posteriormente impugnaron. Las cartas documento fueron enviadas el 10 de julio de 2023, y ante la falta de respuestas satisfactorias, el 30 de agosto de 2023 se presentó la demanda en sede judicial.
La firma demandada sostuvo durante todo el proceso que no existió relación laboral, sino una vinculación comercial por prestación autónoma de servicios de transporte. Argumentó que los choferes eran propietarios de sus camiones, que fijaban sus horarios y asumían los riesgos de la actividad, por lo que rechazó toda responsabilidad indemnizatoria. También solicitó citar como terceros a Cervecería y Maltería Quilmes y a Comercial del Mar S.A., al considerar que eran ellas quienes controlaban la operatoria de distribución. Sin embargo, esa postura fue descartada al quedar acreditada la dependencia y subordinación propia del vínculo laboral.
Durante 2024 se desarrolló la etapa probatoria, con oficios bancarios, pericias contables y testimoniales que confirmaron la existencia de dependencia laboral encubierta. El 17 de octubre pasado se celebró la vista de causa, y tras los alegatos finales el expediente quedó en condiciones de sentencia.
En el fallo, el Tribunal rechazó el planteo de la empresa según el cual se trataba de transportistas autónomos. Reconoció vínculo laboral no registrado y ordenó indemnizar a a uno de ellos con $260.156.607,47 y al otro con $234.695.487,48, sumando $494.852.094,95, monto actualizado por RIPTE y con interés puro del 3% anual. La resolución impuso además la entrega de certificados laborales y cargas accesorias previstas en la Ley de Contrato de Trabajo.
A ese monto deben adicionarse las costas procesales, ya reguladas en la sentencia, que incluyen honorarios profesionales por más de $149 millones, entre ellos los del apoderado de TASA, los de los letrados vinculados al rechazo de terceros y los del perito contador. Se establece que, en caso de incumplimiento en el pago, los intereses se acumularán al capital y continuarán devengándose conforme la doctrina legal vigente de la Suprema Corte bonaerense.