La ciudad italiana de Florencia dispuso este viernes el cierre de museos, cines y teatros en medio de un temporal que afecta a varias regiones del país y que ya causó algunas inundaciones y aumentó el caudal del río Arno.

El Centro de coordinación de emergencias florentino ordenó estos cierres y prorrogado el de escuelas, guarderías, mercados, cementerios y bibliotecas hasta las 14 del sábado, cuando presumiblemente cesará la alerta meteorológica.

El río Arno cruza Florencia, por debajo del monumental Ponte Vecchio, con un caudal superior al normal, alcanzando los 4 metros, aunque aún por debajo del umbral “crítico” de los 5,50 metros.

La capital toscana ya registró los primeros desbordamientos, como el del torrente Rimaggio, que inundó parte del barrio de Seso Florentino. Los bomberos informaron que recibieron peticiones de auxilio de decenas de conductores en apuros.

Las regiones de la Toscana y Emilia-Romaña, en el norte de Italia, están siendo golpeadas este viernes por un temporal de lluvias que obligó a decretar el “código rojo” de alerta.

Emilia-Romaña trata de protegerse de este modo de los aluviones después de las inundaciones sufridas en los últimos años, como las dos de mayo de 2023, que concluyeron con 17 víctimas mortales y cuantiosos destrozos materiales.

Por eso, Bolonia decretó el desalojo de plantas bajas y sótanos así como el cierre de escuelas y otros espacios de sus barrios ante la inminencia del temporal.

Su río principal, el Reno, que desciende de la cordillera de los Apeninos para desembocar en el mar Adriático, ya aumentó los 2,3 metros en su caudal pero preocupa “mucho” el Lamone, que cruza ambas regiones en alerta.

En el caso del Reno, las autoridades extendieron el nivel de alarma hasta la medianoche de hoy, ya que a partir de entonces su caudal debería empezar a descender.

EFE.