Por el denodado esfuerzo y profesionalismo de cada uno de los bomberos que trabajaron de manera ininterrumpida durante tres días, el voraz incendio de la distribuidora Torres y Liva y de 47 viviendas no tuvo como saldo la pérdida de vidas humanas.

El accionar rápido y eficiente también permitió ir más allá: pusieron su propia vida en riesgo por recuperar valiosos recuerdos de las casas destruidas. En esos gestos demostraron que la empatía y la solidaridad con el otro difícilmente se pierde, incluso en momentos de tensión y dolor, y lograron apaciguar al menos un poco el dolor de aquellos que lo habían perdido todo.

Por eso, LA CAPITAL decidió homenajear a los hombres y mujeres que trabajaron de manera incansable. Aquí algunos nombres y un reconocimiento de parte de todos los que hacemos este medio: ¡GRACIAS!

Raúl Brausteiner, Martín Vargas, Alberto Cortez, Alberto Gabba, Andrés Albornoz, Maximiliano Liporacci, Ariel Puccineri, Bernardo Muñiz, Carlos Pinas, Claudia Maldonado, Julio Curcio, Juan Ibáñez, Fabián Morán, Fernando Sierra, García Zalguizurri, Gastón Avalos, Gastón Gil, Horacio Clement, Hugo Pérez, Ismael Tognini, Rodrigo Párraga, Karina Harispe, Luis Coria, María Fur, Mauricio Flores, Nicolás Álvarez, Norberto Debliger, Pablo Prieto, Pablo Aguirre, Yanina Almirón, Walter Perlan, Walter Faraminan, Gabriel Terminiello, Rodrigo Agnone, Esquisito Dager, Paola Maldonado, Pablo Pena, Pablo Polarolo, Pablo Facchini, Marcos Gopar, Luis De Andreotti, Micaela Ortola, Miguel Alé, Marcelo Panario, Marcelo Herrera, Juan Chávez, Jesica Godoy, Diego Henrik, Gustavo Calabria, Walter Godoy, Doris Curcio, Rubén Montenegro, Lucas y Matías Romero, Marcelo Arias, Marcos Franco, Damián Rojas, Gabriel Ghilini, entre otros.