Una pelea en un restaurante, un padre de familia violento y alcoholizado y una ex que ingresó en una vivienda a pesar de tener una orden de restricción de acercamiento fueron algunos de los episodios de violencia de género y familiar que se registraron en las últimas horas en la ciudad.

El primero de los hechos ocurrió ayer a la noche, en un restaurante de calle 126 y colectora de Batán, cuando una mujer de 35 años que cenaba en el lugar con su familia fue atacada por hombre al que no conocía, quien la tomó de los pelos, la arrastró por el comercio y le propinó una salvaje golpiza a puños y patadas a la vista de todos.

Cuando la mujer perdió el conocimiento el hombre dejó de golpearla, acto seguido rompió el vidrio del comercio e intentó irse. Testigos aseguraron que el agresor se había peleado antes con otro cliente y, sin motivo aparente, atacó a la mujer.

Un llamado al 911 alertó a la policía de la situación y personal de la comisaría octava fue hasta el lugar y detuvo al hombre, de 35 años. Por disposición de la Fiscalía de Flagrancia fue imputado por los delitos de “daño y lesiones” y quedó alojado en la Unidad Penal 44 de Batán, tras negarse a declarar.

Otro de los hechos de violencia ocurrió durante la madrugada en el barrio Parque Independencia, donde un hombre de 51 años, alcoholizado y drogada, retuvo en la casa a su esposa e hijo, a quienes golpeó y amenazó con un cuchillo.

Fuentes oficiales informaron que un vecino llamó al 911 para denunciar que desde el interior de una vivienda se escuchaban gritos, ruidos de golpes y roturas. Ante esta situación, personal de la comisaría quinta fue hasta el lugar, donde encontraron a un hombre “fuera de sí” que hizo frente a los policías con una cuchilla.

Los policías pudieron disuadir al hombre, de 51 años, para que se entregara. Luego las víctimas, una mujer de 51 años y un joven de 23, explicaron que había consumido alcohol y estupefacientes y que en determinado momento, sin motivo, comenzó a agredirlos y amenazarlos con una cuchilla para que no salieran de la casa.

El fiscal Daniel Vicente imputó al hombre por “amenazas calificadas por el empleo de arma blanca y lesiones agravadas por el vínculo” y dispuso que quedara alojado en la Unidad Penal 44 de Batán. Además, la mujer y el joven fueron acompañados a la Comisaría de la Mujer y la familia en donde se gestionó por medio del Juzgado de Familia N°2 en turno medidas cautelares de restricción de acercamiento y exclusión del hogar.

El último de los hechos se produjo en una casa del barrio Bernardino Rivadavia, a la que una mujer, de 26 años, ingresó por la fuerza, aprovechando que el dueño de la vivienda, su expareja, se encontraba en el trabajo.

Según informaron fuentes oficiales, la mujer, por orden judicial, tenía prohibido acercarse a esa casa y a su expareja, ya que tenía vigente una orden de restricción.

Vecinos que escucharon ruidos en la casa llamaron al 911 y un patrullero de la comisaría cuarta fue hasta el lugar y detuvo a la mujer, quien quedó imputada por desobediencia y violación de domicilio.