– Fecha y lugar de nacimiento.

– Mar del Plata, 30 de diciembre de 1962.

– Actividad profesional y estado civil.

– Abogado y actual diputado nacional. En pareja con Eugenia. Tengo cinco hijos: Guadalupe, Joaquín, Gonzalo, Martina y Simón.

– Un recuerdo de la infancia.

– Muchos. La Base Naval, de acompañar a mi viejo; Camet; mi viejo me llevaba al estadio San Martín a ver a Boca. Los domingos me mandaban a comprar la pasta, iba con la olla, y si te olvidabas el repasador para no quemarte las piernas cuando volvías, había que ponerla en el piso y cuidar que no se pierdan los ravioles.

– ¿Cuándo y por qué empezó a militar?

– No milité. Siendo juez federal, me llama Mauricio (Macri) cuando gana la ciudad y me ofrece ser ministro de Justicia y Seguridad, con la posibilidad de crear la Policía Metropolitana. Se me generó una disyuntiva, me había costado mucho mi carrera judicial, no tenía antecedentes en la familia, pero entendía que la política es el lugar desde donde resolver los problemas de muchos. Hablé mucho con amigos y tomé la decisión de irme, entendía que había que renunciar y no pedir licencia. Era una una rara avis, no había hecho campaña. Y al poco tiempo falleció mi mamá. Ella estaba en terapia y me dijo “qué hiciste, nene”. Uno de mis temores era el laburo, yo vivo de eso, mi viejo marino retirado, de hecho tuve que entrar a Tribunales a los 20 porque a los 21 se me acababa la obra social, entonces yo pensaba ¿si me va mal qué hago? Me junté con amigos y les dije “si me rajan, ¿alguno me da laburo?”. Y uno de ellos me dijo “te mantengo una oficina en la empresa”. Y todavía está.

– ¿Por qué se dedicó a la política partidaria?

– Yo confío mucho en la gente, Mauricio (Macri), logró convencerme. El, Gabriela (Michetti), María Eugenia (Vidal). A Gabriela la conozco de antes y al ex marido también, porque siendo fiscal federal investigaba las denuncias que hacia él como productor de TV. No había celular, nada, y empecé a tener una relación con él, le pedía que las cosas que le denunciaban en TV me las pase para investigar. Después nació una relación personal y a Gaby se le ocurrió presentarme con Mauricio. Después empecé a conocer a toda la gente del equipo y ahí dije, bueno, es una decisión de vida. Para mí la política es ayuda, es disponer de tu tiempo para la gente. Si el día de mañana no me dedico a la política partidaria, y tengo que poner un estudio jurídico, voy a seguir haciendo lo mismo. Lo hice siempre. Hay gente que hace política sin darse cuenta que hace política. Se ve que esa vocación la tenía desde otro lugar. Es algo que lo siento, veo alguien que tiene un problema y trato de resolverlo. Me esfuerzo mucho en contestar uno por uno los mensajes de Whatsapp, uno de mis grandes temores es dejar de ser el Gordo Montenegro. A uno le da miedo dejar de ser el Gordo Montenegro, por eso me esfuerzo mucho, por más que tenga sueño contesto igual, a ver si creen que me la creo porque soy diputado o fui embajador.

– En caso de ser electo, ¿cuál sería su primera medida como intendente?

– La primera, creo, es tirar el paredón del barrio San Jorge. Cuando estuve ahí y vi el paredón que cuando llueve se inunda. Las reuniones de gabinete nunca pueden ser dentro del gobierno, sino en distintos lugares de la ciudad, como hacíamos en Capital Federal. Salir del barrio, hacer la reunión, si algún vecino quiere hablar lo escuchás, no dejar nunca la escucha. Como medida concreta podemos estar diez horas, no hay ninguna medida que pueda ser tomada aislada de otra. Mi despacho será en el COM, porque una de las problemáticas inmediatas es la seguridad y todo lo que tiene que ver con pavimentación, asfalto y espacios públicos, pero abordado de la misma manera: iluminación, la seguridad, el paso de la ambulancia y el camión de basura, del colectivo, la modificación de los recorridos del transporte público. Mar del Plata tiene 20 mil cuadras de las cuales la mitad no están asfaltadas. Hay que pensar cómo se puede modificar para darle solución al chico que va a la escuela y tiene que caminar en el barro. Creo que lo que siempre voy a hacer es seguir escuchando, y tratar de resolver el problema macro pensando cómo dar vuelta el ser primeros en el ranking de la desocupación. Este es un un trabajo que exige no olvidarme nunca del que tiene problemas micro, hay que atenderlo también. Es un trabajo que exige un esfuerzo de 15 o 16 horas día, va a tener que ser así, sobre todo en la primera etapa que es cuando empieza a girar la rueda. Una vez que arranca ya tiene otra dinámica.

– ¿A favor o en contra de la despenalización del consumo de marihuana?

– En contra.

– ¿Pañuelo verde o celeste?

– Celeste.

— Abogado, ex juez federal y precandidato a intendente

Guillermo Tristán Montenegro, alias “El Gordo” para sus amigos, tiene 56 años, nació en Mar del Plata y asistió a la escuela N°1 Pascuala Mugaburu y al Instituto Peralta Ramos. Se recibió de abogado en la Universidad de Buenos Aires (UBA) e ingresó a la Justicia, camino que recorrió hasta convertirse en juez federal. Ya en el terreno de la política, fue ministro de Seguridad y Justicia en el primer gobierno de Mauricio Macri como jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires y actualmente es diputado nacional. Ahora es el precandidato a intendente de Juntos por el Cambio.