LIMA, Perú (por María Julia Caro) – El marplatense Damián Jajarabilla quedó decimocuarto en la clasificación individual masculina del arco curvo en los XVIII Juegos Panamericanos de Lima 2019.

El joven de 20 años totalizó 657 puntos y se ubicó a unidades del primero, el estadounidense Brady Ellison, quien con un registro de 702 estableció un nuevo récord mundial.

Jajarabilla logró situarse en la mitad superior de la tabla general (entre 32 competidores), y en su primer cruce eliminatorio enfrentará mañana (a las 12.10) al brasileño Marcelo Da Silva Costa (19°).

Asímismo, en combinación con el score de Florencia Leithold Juárez (629), totalizaron 1286 y quedaron séptimos en arco curvo por equipo mixto.

En octavos de final, el sábado, desde las 11, enfrentará a Venezuela (décimo).

Jajarabilla reconoció que los nervios por su primera participación panamericana le jugaron en contra, aunque terminó con un score aceptable.

“Fue una serie inicial algo complicada. Al ser mi primera vez en los Juegos Panamericanos tenía bastantes nervios para la primera tirada, aunque hice lo mejor que pude”, explicó.

Consultado sobre si el principal objetivo estaba centrado en el equipo mixto, el marplatense sostuvo que “creemos que tenemos más posibilidades en esa modalidad, así que era uno de los objetivos. Y también hacer un buen puntaje para quedar de mitad de tabla para arriba y tener así una llave más accesible. Eso lo cumplimos”, enfatizó.

Sobre la calidad de los rivales a los que tiene que enfrentar en estos Panamericanos, indicó que “conozco a casi todos. El nivel es muy alto. Yo hice una tirada algo floja y eso me bajó cuatro posiciones, aunque después pude recuperar y subir en la clasificación. Somos varios en un nivel similar, con algunos destacados como Estados Unidos y Canadá. Tanto que hoy -por ayer- se batió el récord del mundo”.

Jajarabilla, quien logró su plaza para Lima luego de ganar la prueba de clasificación y de ser tres veces primero en el 5° Torneo Ranking Mundial, disputado en Chile, se convirtió en el primer marplatense en disputar unos Panamericanos en la disciplina tiro con arco. Y el año pasado fue bronce en los Juegos Odesur, en Cochabamba, Bolivia.

“Esto es bien diferente -aseguró-. Parece que son similares, aunque el ambiente competitivo es mucho mayor. Hay rivales de más nivel. Y por supuesto que suma una experiencia personal muy grande”.

Por último, con relación a las instalaciones deportivas y la convivencia en la Villa Panamericana, solo tuvo palabras de elogio. “Todo es espléndido. Es un orgullo poder estar acá. Los peruanos son muy amables en todos lados. El lugar de competencia está muy bien, todo bien organizado, no hubo ningún tipo de problema. Es sorprendente, porque en todos los torneos siempre pasa alguna cosa. Pero acá, hasta ahora, marcha todo perfecto”, concluyó.