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Policiales 9 de agosto de 2023

Juzgarán a tres acusados de matar a un delivery para robarle la moto

Se trata de Sergio Urbistondo, Franco Altamiranda y su primo, Claudio "Pirulo" Altamiranda. Están imputados por el crimen de Gabriel Aramayo, sucedido en Polonia y Hernandarias en junio de 2020. Dos menores habían quedado desvinculados del caso por ser no punibles.

Gabriel Armayo fue asesinado en junio de 2020.

Las calles de Mar del Plata, como las del resto del país, todavía lucían casi desiertas por el aislamiento obligatorio cuando en junio de 2020, en plena pandemia del Covid-19, una pandilla se abalanzó sobre Gabriel Aramayo (29) para robarle la moto.

Fueron breves instantes pero los agresores golpearon brutalmente al joven repartidor de comida, en la esquina de Polonia y Hernandarias donde había detenido su marcha. Como consecuencia de las lesiones sufridas en ese ataque, la víctima falleció días después en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA).

El caso Aramayo llegará a juicio la próxima semana, más de tres años después. Desde el martes 15 de agosto, en la sala del Tribunal Oral Nº 4, se sentarán en el banquillo de los acusados Sergio Urbistondo (37), Franco Altamiranda (25) y su primo, Claudio “Pirulo” Altamiranda (22).

Los tres hombres se encuentran detenidos, aunque “Pirulo” lo está en el marco de la investigación de otro hecho delictivo, ya que fue excarcelado en la causa del homicidio de Aramayo al comprobarse que no estuvo en el lugar del hecho. En tanto, dos adolescentes que habían sido incriminados en su momento quedaron descartados de la pesquisa porque eran menores de 16 años -no punibles- al momento del crimen.

La hipótesis

El fiscal Leandro Arévalo consideró, tras la instrucción penal preparatoria, que Aramayo había sido asaltado bajo la modalidad de “robo piraña” por una pandilla de jóvenes residentes de un asentamiento ubicado entre los barrios San Antonio y Santa Mónica.

El objetivo de los agresores era, según sostiene el investigador, robarle la motocicleta a la víctima para luego venderla completa o desguazarla y hacerlo en partes. Además, considera que “Pirulo” Altamiranda estaba vinculado a dicha maniobra, aunque deberá probarlo ante los jueces Gustavo Fissore, Alfredo Deleonardis y Juan Galarreta.

Conforme la reconstrucción del caso, cerca de las 23 del martes 9 de junio de 2020 la víctima conducía su motocicleta marca Honda XR de 150 cilindradas de colores rojo y blanco, con la que trabajaba como delivery de comida. El repartidor circulaba por la avenida Polonia y, al llegar a la altura de Hernandarias, un grupo de entre cuatro y seis jóvenes atacaron a golpes de puño y palazos.

Los vecinos de la zona escucharon los ruidos desde sus casas y salieron en auxilio del motociclista, lo que permitió que los ladrones intentaran escapar y abandonaran allí el botín: el vehículo, un bolso y una zapatilla. Para que la fuga se consumara un miembro de la pandilla que no se hallaba en el lugar apareció sorpresivamente y efectuó disparos al aire con un arma de fuego, lo que amedrentó a los testigos.

Aramayo, a pesar de los golpes, logró recomponerse parcialmente y en el mismo rodado que habían intentado robarle se dirigió por sus propios medios al HIGA. Allí, los médicos constataron que presentaba graves lesiones: entre ellas, padecía un severo traumatismo de cráneo, que motivó su internación inmediata.

Allanamiento realizado en el operativo para detener a "Pirulo" Altamiranda.

Allanamiento realizado en el operativo para detener a Claudio Altamiranda.

Cinco días después, el 14 de junio, el repartidor murió en el nosocomio local y la investigación del hecho pasó a ser caratulada “Homicidio en ocasión de robo”. A través de ello, Arévalo logró identificar al sospechoso de haber efectuado los disparos como Claudio “Pirulo” Altamiranda y ordenó su detención.

Homicidio

El 15 de junio se consumó dicho procedimiento y Altamiranda quedó alojado en la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán. Al comparecer ante el instructor judicial, el sospechoso se declaró inocente e incluso hubo una protesta en la puerta del edificio de Tribunales en reclamo de su excarcelación.

En simultáneo, tomó parte de la investigación el fiscal del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil, Marcelo Yanez Urrutia. Es que el esclarecimiento del hecho indicaba que en la pandilla había menores.

Familiares y allegados de "Pirulo", cuando pedían su libertad.

Familiares y allegados de “Pirulo”, cuando pedían su libertad.

Finalmente, se acreditó con pruebas preliminares que el grupo que había atacado a Aramayo estaba compuesto por Sergio “Peluchín” Urbistondo, Franco “Curly” Altamiranda y al menos dos adolescentes a los que se logró identificar y que, por su edad, resultaban no punibles.

De esa forma, los menores quedaron desvinculados de la causa y los otros dos acusados fueron detenidos. Como contraparte, la Justicia de Garantías aceptó el pedido de excarcelación de “Pirulo” Altamiranda aunque permaneció procesado en el expediente. Tiempo después, fue detenido nuevamente en el marco de la comisión de un asalto a mano armada tipo “entradera” en una vivienda.

"Pirulo" Altamiranda fue detenido nuevamente tras una entradera.

“Pirulo” Altamiranda fue detenido nuevamente tras una entradera.