Según referentes del sector, la suba se debe a la poca oferta de hacienda y a las lluvias en los campos de la provincia de Buenos Aires, entre otros factores. No se descartan más incrementos para fin de año.
Ya en la recta final de 2025, el precio de la carne aumentó más de un 10 % en Mar del Plata y no se descartan nuevos ajustes, en un contexto generalizado de consumo a la baja.
Referentes del sector explicaron que, entre otros factores, la suba se debe principalmente a la poca oferta de hacienda, las lluvias que afectaron a gran parte de la provincia de Buenos Aires en el último tiempo -lo que ha dificultado el traslado de ganado- y, en menor medida, a la presión exportadora.
“La hacienda en pie ha aumentado entre un 15 % y un 20 % en las últimas semanas. Y eso te condiciona el precio del producto en góndola, que tuvo un ajuste de entre el 10 % y el 15 % aproximadamente”, explicó Gustavo Blois, dueño de una reconocida cadena de carnicerías en la ciudad.
Y agregó: “No hay hacienda para abastecer el mercado. Sumado a esto, las lluvias en la provincia de Buenos Aires han dificultado mucho la salida de ganado en las zonas rurales”.
Blois se refirió a otro factor para entender el incremento, aunque con menor impacto hasta ahora: la presión exportadora. “Si mejoran los precios para vender al exterior, lo poco que hay para consumo interno se destina a eso”, indicó el empresario.
De cara a las fiestas de fin de año, cuando suele haber una mayor demanda por los festejos, el empresario anticipó que podría haber nuevas subas. De todos modos, advirtió que el consumo de carne se mantiene a la baja desde abril.
“El bolsillo de la gente está muy castigado. Hace mucho que hay una merma en el consumo, mucho antes de este último aumento. Hace más de seis meses, por lo menos, desde abril. Aún así, la carne es el mejor alimento que hay, esperemos que mejore la producción para que haya más oferta y ventas”, analizó Blois.
Un panorama similar brindó Osvaldo Quiroga, secretario general del sindicato de la Carne de Mar del Plata.
“Nosotros registramos una suba de entre el 8 % y el 15 % en general, según el corte. Esto se debe a que hay poca hacienda, a las lluvias que afectaron los campos de la provincia y al aumento de insumos, que, por más que sea poco, suma. También impacta esta época del año, en la que suele crecer un poco la demanda”, señaló Quiroga.
Más allá de que el consumo suele tener un repunte a fin de año, el sindicalista resaltó que “está flojo y mantiene niveles bajos”, con una leve mejoría en julio, tras el cobro del medio aguinaldo.
Quiroga sostuvo que tampoco ayudan a las ventas las pocas promociones de billeteras virtuales, que tiempo atrás fueron un incentivo para comprar carne.
“Nosotros percibimos una disminución en las ventas desde el 2023. Cayeron fuerte en 2024 y en 2025 se mantienen, con variaciones, en los niveles del año pasado. No mejora la situación. El consumo de carne es el más bajo en 30 años”, consideró Quiroga.
Por este motivo, la demanda de pollo viene en alza al tratarse de una opción más económica, incluso con una demanda superior a la de la carne roja por momentos.
“El pollo se puso a la par de la carne roja en el último tiempo. Y hasta hace dos, tres meses, la había superado. Es una mejor alternativa para muchas familias: si no alcanzo a comprar un kilo de carne, compro tres de pata y muslo, que rinden más comidas”, concluyó Quiroga.