El Día de la República Italiana reunió ayer a inmigrantes y descendientes de italianos en una serie de emotivos actos en la ciudad en los que se conmemoró el 71º aniversario del día en que el pueblo italiano eligió, a través de un referéndum, transformar el país en una república constitucional y abolir la monarquía, luego de 85 años de reinado de la dinastía de los Savoia (incluyendo 20 de dictadura fascista).

Durante la mañana, el cónsul de Italia en la ciudad, Dario Cortese, junto a referentes del Comites (Comité para los Italianos en el Exterior) de la circunscripción consular de Mar del Plata, de la Federación de Sociedades Italianas, del municipio y alumnos de establecimientos educativos celebraron dos actos: uno en el monumento al general San Martín y otro en la Plaza Capitolina donde se encuentra ubicado el monumento a Rómulo y Remo, un símbolo de la comunidad italiana.

Una vez concentrados allí, y luego de entonar los himnos nacionales argentino e italiano, interpretados por la banda de música de la Agrupación de Artillería antiaérea del Ejército 601, llegó el momento de los discursos.

“Un camino de armonía”

El integrante del Consejo General de los Italianos en el exterior, Marcelo Carrara, celebró el día que se eligió seguir “un camino en armonía” y exhortó a todos los presentes a “trabajar siempre juntos para construir este concepto”.
“Queremos convocar a seguir trabajando para seguir construyendo la república italiana no sólo a los residentes en Italia, sino también los que vivimos a miles de kilómetros”, señaló, junto al presidente de la Federación de Sociedades Italianas, Rubén Pili.

En representación de la Municipalidad y como parte de la colectividad, el subsecretario de Producción, el ingeniero Alberto Becchi, se mostró emocionado de formar parte del acto.

“La verdad es que estar hoy acá en representación del señor intendente es muy sentido porque además pertenezco a esta colectividad”, señaló.

Presencia en el gobierno municipal

“No recuerdo gestión municipal que esté acompañando a la comunidad italiana como ésta. En este momento somos cuatro los dirigentes de la colectividad que estamos trabajando en el Ejecutivo y llevando adelante varios proyectos y sobre todo trabajando mucho con regiones y con el Estado italiano. Esto realmente, como integrante de la colectividad, me parece muy importante”, continuó.

Agregó también los desafíos que los depara el futuro: “el poder empezar a resolver nuestros problemas de la red consular” y “el empezar a pensar en la colectividad que viene”. Sobre esto último, señaló: “No podemos permitir que nuestros hijos y nuestros nietos no puedan seguir gozando de todo el desarrollo que ha tenido nuestra colectividad en la ciudad”.

Por su parte, el cónsul, Dario Cortese, se mostró muy entusiasmado de conmemorar su primer 2 de junio en la ciudad.

“Para mí es un honor celebrar en calidad de cónsul el primer dos de junio aquí y representar a Italia en este hermoso lugar”, señaló ante la mirada expectante de todos los presentes.

“La república cumple hoy 71 años y aunque no parezca poco, en realidad es bastante joven por lo que sigue necesitando que la mimemos y la cuidemos. Porque una república democrática es el logro más grande que un pueblo puede alcanzar como sistema para gestionar la cosa pública y los intereses comunes”, señaló.

La mujer, pilar de la República

Recordó también que aquél 1946 fue la primera vez que votaron las mujeres, razón por la cuál decidió focalizarse en ello y destacar su rol en el desarrollo del país.

“En Italia, durante la Primera Guerra Mundial, y más aún después de la Segunda Guerra Mundial, se cargaron sobre sus espaldas la vida civil del país, tuvieron que hacerse cargo y lo hicieron con valentía, con coraje y con pasión”, destacó.

Señaló, a su vez, el papel que tuvieron las mujeres italianas en Argentina, al asegurar que “ellas transmitieron nuestra cultura”.

Como muestra también de la importancia de la cultura para su gestión, Cortese convocó a la comunidad al concierto gratuito que se celebró anoche en el Teatro Colón, donde el músico italiano, Sebastiano María Vianello, protagonizó, junto a la Banda Municipal, un repertorio compuesto por Vivaldi y Piazzolla con un violín de 1600.