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La Ciudad 21 de octubre de 2018

“La inflación era mucho más grave de lo que preveíamos”

Fernando de Andreis, secretario general de la Presidencia, admitió que se subestimó el fenómeno inflacionario, analizó el escenario actual, ratificó el rumbo y habló de los cortocircuitos con Carrió y la UCR.

Fernando de Andreis.

Fernando de Andreis es uno de los funcionarios más cercanos a Mauricio Macri. Fue parte de su equipo de trabajo en la Ciudad de Buenos Aires y actualmente, desde su rol de secretario general de la Presidencia de la Nación, acompaña al presidente a la mayoría de sus actividades. Por eso, asegura que, ante una situación de crisis como la actual, el presidente “siente el peso de la responsabilidad sobre sus hombros”, pero está “convencido de que el camino es el correcto”.

En un mano a mano con LA CAPITAL, durante su paso por la ciudad, De Andreis analizó la situación actual y admitió que se “subestimó” el fenómeno de la inflación. “Hubo un exceso de optimismo”, reconoció. Además, habló del “fantasma” de diciembre, del escenario para el año que viene y de los cortocircuitos con Elisa Carrió y la UCR.

– ¿Cómo ven el panorama para los próximos meses, con la situación económica que atraviesa el país?

– Estamos trabajando fuerte. El presidente es el primero que está pensando todos los días como podemos hacer para que esta situación dure lo menos posible y volver a retomar la senda del crecimiento que tenía la economía.

– Siempre está el “fantasma” de lo que puede pasar en diciembre.¿Consideran que está garantizada la cuestión social?

– Ahora se está votando en el Congreso el presupuesto del año que viene, que vuelve a reflejar la preponderancia que tiene la inversión social, como nunca antes había sucedido.

Además, el presidente anunció una serie de medidas orientadas a acompañar a las personas que más están sufriendo. Y por supuesto hay que estar atentos. Este país tiene una historia negativa con los fines de año pero es algo que hay sacárselo de la cabeza y revertirlo. Se está trabajando en ese sentido y estamos tranquilos porque debería transcurrir todo en paz.

– Van a afrontar un año electoral en un contexto complicado. ¿Cómo se preparan para esa situación?

– Falta mucho para el año que viene. Mauricio está realmente las 24 horas del día rompiéndose la cabeza para ver cómo se sale de esto lo antes posible. En ese sentido, se siente el acompañamiento de la gente, el entendimiento de que a pesar de que es una situación angustiante y que genera frustración, a ninguno se le escapa que esta tiene que es la última crisis económica de Argentina.

– Desde muchos sectores, han pedido una mesa de diálogo junto a la oposición, la Iglesia u otros actores. ¿Se evalúa esa posibilidad?

– Desde el principio, eso lo vivimos como algo natural, cotidiano y básico. Este es el momento en que un gobierno genera más apertura y diálogo con los distintos sectores, desde la vuelta de la democracia.

Es una realidad porque tanto en la ciudad de Buenos Aires como ahora, nunca fuimos mayoría en el Congreso. Por lo tanto, es una gimnasia que la sentimos natural. También en la conformación de nuestra propia alianza de gobierno.

Periódicamente nos juntamos con sectores de la Iglesia, con sindicatos, organizaciones sociales, gobernadores o intendentes. Es algo natural, que lo vamos a seguir haciendo.

– ¿Los cortocircuitos con Carrió o con la UCR debilitan a la alianza o son parte de las reglas de juego?

– Podemos hacer algún paralelismo con la experiencia en la ciudad. El espacio político que armó en la ciudad estaba conformado por peronistas, radicales, independientes y gente que no venía de la política. Y la coalicion actual también.

Nos pensamos como un espacio político diverso. Esa diversidad es lo que enriquece. Esa manera de ver cosas distintas pero compartiendo valores, es lo que nos hace sólidos. Y de ninguna manera nos creemos los dueños de la verdad ni que esto se dirime con un verticalismo que nos tenía acostumbrado la política argentina. Nos sentimos cómodos en la discusión.

– ¿Entienden que haya un sector de los votantes de Cambiemos que estén desilusionados ?

– Es una situación compleja. Sí somos conscientes de que genera frustración, enojo, que en algún caso puede haber una desilusión, pero también sentimos que el votante de Cambiemos tiene muy en claro que este es un gobierno y un presidente que representa claramente el cambio que eligieron en 2015. Que por ahí no se están dando tan rápido como esperaban los resultados económicos. En otras materias como la transparencia, esos cambios se notan y se valoran. Ese acompañamiento lo sentimos.

– A la hora de hacer un balance, ¿qué errores reconocería en lo que va de la gestión?

– Es una pregunta siempre difícil. Hoy con la experiencia que adquirimos en estos casi tres años, diría que haría algunas cosas de otra manera. En principio, a veces nos queda la sensación de que hubo un exceso de optimismo y subestimamos algunas cuestiones vinculadas al tema de inflación o lo macroeconómico. Era mucho más grave de lo que preveíamos. Pero me parece que lo fundamental está claro: es el cambio que propuso Mauricio para las elecciones del 2015. Es algo innegociable.