La cantautora colombiana Marta Gómez brindará un concierto íntimo el domingo 2 de junio, a las 20, en el Teatro Roxy (San Luis 1750).

Gómez presentará su espectáculo “Un silencio que llegó de lejos”, acompañada por el bajista Andrés Rotmitrovsky. Recorrerá canciones de todo su repertorio, por ejemplo las que le valieron nominaciones al Grammy latino en 2014 y en 2016, y hará especial hincapié en su clásico Para la guerra nada, donde incluirá estrofas escritas por los alumnos del colegio CADS, en alusión a la Guerra de Malvinas.

– ¿Qué implica “Un silencio que llegó de lejos”?

– Volver a lo esencial, volver al momento en que se compone una canción o a ese momento mágico en que nos enamoramos de una canción de otro compositor y la hacemos nuestra.

– ¿Este encuentro entre ustedes es solamente en vivo o tienen planes de registrarlo?

– Ya está registrado. Los tres conciertos que hicimos en Suiza hace unos meses fueron para grabar un disco que saldrá en formato físico acetato dentro de seis meses y en un año de forma digital.

– ¿En qué situación se encuentra la campaña internacional “Para la guerra nada” que promueve desde agosto de 2014?

– Es increíble pero sigue rodando. La gente sigue componiendo y sumando estrofas para la canción, ya vamos por más de 3.000. Julio y yo que iniciamos la propuesta ya no podemos hacerle seguimiento a todo porque nos llevaría todo nuestro tiempo y necesitamos planear conciertos y componer canciones, pero es maravilloso ver como la gente sigue sumando sus ideas y es una canción que seguiré cantando toda mi vida.

– ¿La música y las artes en general tienen que tener una “utilidad”?

– Yo pienso que sí. Algún tipo de música tiene la utilidad de alegrar, de acompañar, de hacer bailar, de hacer mover y eso es válido. Pero si además de eso, puede tocarnos alguna fibra interna, puede hacernos mejores seres humanos, pues aún mejor. Y eso es lo que yo intento con mis canciones.

– ¿Cómo observa la actual escena iberoamericana de la canción de autor?

– Los cantautores nunca moriremos, nunca nos extinguiremos, básicamente porque siempre hay temas para componer. Hay mucha desigualdad, hay mucha guerra, hay mucho dolor, mientras eso sea así, el arte seguirá expresando ese dolor y ese sufrimiento. Así que sí, para bien o para mal, los cantautores y las cantautoras estaremos allí para contar lo que sucede, para intentar sanar y para poner en palabras y melodías lo que sentimos.

La recaudación del concierto será utilizada en su totalidad para que alumnos del CADS y de escuelas estatales realicen un viaje de estudio a las Islas Malvinas. La idea es que recorran Puerto Argentino y visiten el Cementerio Darwin.

La iniciativa cuenta con el apoyo de la Fundación No Me Olvides, presidida por el excombatiente marplatense, Julio Aro, candidato al Premio Nobel de la Paz por su trabajo junto al coronel británico Geoffrey Cardozo en el reconocimiento de más de 100 cuerpos de soldados argentinos caídos en batalla.

Las entradas tienen un costo de 300 pesos. Están a la venta en la boletería del teatro (San Luis 1750) y en el Colegio CADS (San Juan 3594).

Marta en el mundo

Marta Gómez, nació en Girardot, creció en Cali y vivió su adolescencia en Bogotá. En 1999 se trasladó a Nueva York donde vivió diez años. Actualmente reside en Barcelona. Estudió en el Berklee College of Music de Boston, donde recibió el premio de composición Alex Ulanowsky por su bambuco Confesión. Se graduó 2002 con honores y un año después fue elegida por la cantante norteamericana de blues Bonnie Raitt para abrir su concierto al lado de John Mayer. Ese mismo año fue invitada especial en un concierto de la cantora argentina Mercedes Sosa e incluida en el célebre sello discográfico Putumayo World Music.

Su influencia va desde la música tradicional de Latinoamérica a la literatura. El quinto álbum, Musiquita, la hizo ingresar en la lista de los diez mejores discos del género World Music de los European World Music Charts por tres semanas consecutivas. Con ese trabajo, Marta ofreció una serie de conciertos en países tan diversos como Estados Unidos, Países Bajos, España, Suecia, Suiza y en Israel.

Con su sexto disco, El corazón y el sombrero, recorrió buena parte del mundo. Y con su disco doble de canciones infantiles, Canciones de sol y de luna, realizó una gira de conciertos por todo el continente americano. Hoy es una de las voces femeninas más representativas de Latinoamérica. Las dos nominaciones al Premio Grammy le sirvieron para consolidarse en la escena mainstream de los dos lados del Océano Atlántico.