Un hombre fue condenado a 7 años de prisión por haber intentado matar a su cuñado durante un violento ataque ocurrido en el barrio Coronel Dorrego.

El fallo que recayó sobre Víctor Hugo Farías fue dictado por el Tribunal Oral Nº 4, a cargo del juez Gustavo Raúl Fissore, quien homologó el acuerdo alcanzado entre las partes en el marco de un juicio abreviado.

Según el documento al que accedió LA CAPITAL, el magistrado coincidió con la postura del fiscal Carlos Russo, que sostuvo que el imputado actuó con intención homicida cuando el 24 de enero de 2020, alrededor de las 20.30, atacó a su cuñado Darío Enrique Suárez con un cuchillo de cocina y le asestó al menos tres puñaladas dirigidas a zonas vitales del cuerpo.

De acuerdo a lo probado en la causa, el ataque se produjo tras una discusión en el domicilio de la víctima, ubicado en inmediaciones de calle Alberti al 8000. Farías se había retirado del lugar y regresó minutos después armado con un cuchillo, con el que hirió gravemente a Suárez, quien debió ser trasladado de urgencia al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA).

Como consecuencia del ataque, la víctima sufrió lesiones gravísimas, entre ellas la pérdida del bazo, que le dejaron secuelas permanentes y afectaron su vida cotidiana y laboral.

Durante la investigación, la acusación logró acreditar el hecho a partir de los testimonios de la víctima, de familiares y vecinos, así como de pruebas médicas y registros del Servicio de Emergencias 911. El magistrado consideró probado que el resultado mortal no se concretó por circunstancias ajenas a la voluntad del agresor.

Al momento de fijar la pena, Fissore valoró como atenuantes la falta de antecedentes penales del acusado y su presunto buen concepto vecinal, aunque ponderó como agravante la magnitud del daño físico y psicológico ocasionado a la víctima. Finalmente, le dictó la condena a 7 años de prisión, más accesorias legales y costas del proceso, al considerarlo autor penalmente responsable del delito de “homicidio en grado de tentativa”.

De acuerdo a la información recabada por este medio, Farías estuvo prófugo durante casi cuatro años hasta que el personal policial de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local lo detuvo en noviembre de 2023 durante un allanamiento realizado en una vivienda donde solía pernoctar usualmente. Desde entonces, permanece alojado en la Unidad Penal Nº 44 de Batán.