Interés general

Los argentinos leen y están más informados, la cumbia se impone al rock y el gran impacto de las redes sociales

Más de la mitad de la población argentina leyó al menos un libro en los últimos meses, un 7 por ciento más que hace cinco años, mientras que un 58 por ciento destina parte de su tiempo a la lectura de noticias, un hábito que hace poco también parecía haber declinado y que ahora resurge en parte gracias al impulso de las redes sociales.

Más de la mitad de las argentinas y los argentinos usan las redes sociales de manera pasiva y lee libros al menos algunos días a la semana, mayormente en papel, en tanto que la mayoría están “muy informados”, según los resultados que arrojó una encuesta digital de consumos culturales sobre las tendencias, hábitos y expectativas en relación con la cultura y sus expresiones. El Ministerio de Cultura de la Nación ofreció los indicadores de la tercera edición de la Encuesta Nacional de Consumos Culturales.

¿Cuáles son los hábitos culturales de los argentinos y las argentinas? ¿De qué manera nos relacionamos con la música, la literatura, el cine o el teatro? ¿Con qué frecuencia asistimos a eventos culturales? A sala llena en el Centro Cultural Kirchner, el ministro Tristán Bauer, el coordinador del Sistema de Información Cultural de la Argentina, Federico Bonazzi, y Julia Houllé, directora nacional de Planificación y Seguimiento de Gestión, presentaron una encuesta que “permite ver un mapa de los consumos culturales en los últimos diez años”.

 

 

 

 

El informe incorporó como novedad el análisis de la digitalización en todos los ámbitos y la posibilidad de comparar una década signada por la pandemia y el boom de las plataformas. La encuesta anterior había sido presentada el año pasado con el análisis de los resultados obtenidos en 2017, mientras que las conclusiones divulgadas en las últimas horas surgen de un relevamiento concretado entre noviembre de 2022 y enero de 2023. Entre uno y otro trabajo de campo, la mayor utilización de las plataformas digitales y el advenimiento de la pandemia desencadenaron fenómenos culturales novedosos que marcan nuevas tendencias.

El relevamiento dejó algunas tendencias alcistas que en algunos casos destierran mitos y en otros relativizan el peso de algunos fenómenos. Una de las conclusiones más alentadoras es que pese al avance de una cultura audiovisual que ordena el consumo a través de plataformas como Netlfix, Amazon o Star, entre otras, la lectura ganó terreno en los últimos años. Mientras que en la encuesta realizada en 2017 aquellos que afirmaban haber leído al menos un libro en el último año se computaban en el orden del 44 %, según el relevamiento presentado trepan ahora al 51 %.

Noticias y redes sociales

 

También el consumo de noticias por parte de los argentinos registró un incremento del 57 al 68 % en el mismo lapso, un crecimiento que según los analistas está asociado a la aparición de las redes sociales como proveedoras de información. Con menos impacto pero sin dejar de ser optimista se pueden leer los índices de asistencia al cine en un tiempo donde se creía que las plataformas se iban a quedar con el monopolio de espectadores: un 36 %  sigue prefiriendo ir a las salas de exhibición, contra un 35% que lo hacía en 2017.

 



En esta oportunidad, se obtuvieron los datos de una población de personas de 13 años en adelante, residentes en hogares particulares en aglomerados urbanos con más de 30.000 habitantes. Lo interesante es que el cuestionario mantuvo 93 preguntas de las ediciones anteriores, por lo que es posible comparar dos períodos. Además, se caracterizó por una perspectiva federal al juntar información de siete regiones del país: Ciudad de Buenos Aires, el Gran Buenos Aires, la zona del Centro, Noroeste y Noreste argentino, Cuyo y Patagonia.

En el relevamiento, que tomó una población de 3.380 casos, trabajaron equipos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) junto a instituciones académicas como la Universidad Nacional de San Martín (Unsam) y el Centro de Investigaciones en Estadística Aplicada de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (Untref), entre otras que articularon el trabajo de campo y el procesamiento de datos.

 

Radio, televisión, cumbia y reggaetón

 

 

 



¿Cómo mira la televisión la población argentina y qué programa es el predilecto? Según la encuesta, un 91 por ciento de los argentinos consume programas. La mayoría mira televisión de aire o cable a través del televisor y prefieren los programas informativos.

Sin embargo, la utilización varía según la edad. Mientras que quienes tienen 65 años o más miran en un 98% televisión, el porcentaje desciende en los jóvenes de entre 18 y 29 años con un 84%.

 

 

Algo similar ocurre con la radio: quienes tienen entre 50 y 64 años conforman el rango etario que más realiza este consumo y quienes tienen entre 13 y 17 se ubican en el extremo opuesto. “Aparece como novedad la escucha de podcast que alcanza un 13% de la población” y también “la escucha de audiolibros”, advirtió Houllé.

 

 

 

¿Qué tanta importancia le dan a la música los y las argentinas? ¿Qué géneros eligen? “La música es uno de los géneros más expandidos”, precisó la directora nacional de Planificación y Seguimiento de Gestión. Los géneros musicales favoritos fueron la cumbia y el reggaetón con un 62%, el rock nacional con un 59% y el folclore argentino en tercer lugar con un 48%, a diferencia de hace diez años atrás, cuando el género preferido era la música romántica y el folclore.

“Un dato destacable y que habla de la potencialidad de la encuesta es que la música en vivo se consume igual en todo tipo de tamaños de ciudades del país”, indicó Federico Bonazzi sobre un proceso de “homogeneización” detectable en el caso de la música en vivo.

 

 

 

 

En el campo literario, se obtuvo el dato de que “la mitad de la población leyó al menos un libro el último año”, lo que evidencia una población lectora y la mayoría lo hizo con el fin de “entretenerse”. “Quienes tienen entre 13 y 29 años son los grupos etarios que más leen, con porcentajes de lectura de 77% y 58% respectivamente”, arroja la encuesta.

Entre los géneros más leídos se encuentran los de narrativa en primer lugar, textos escolares en segundo lugar y libros de historia en tercer lugar. Una potencialidad de la encuesta es “ayudar a indagar sobre los contenidos que producimos en el país”.

“Vemos que el 11% de la población vio durante el último año una película nacional en el cine, el 72% vio contenidos nacionales en plataformas, el 25% asistió a algún recital de artistas nacionales y el 23% de la población leyó algún libro de un autor o autora nacional”, señaló Houllé.

Con respecto a la elección de las películas y series, las más elegidas en las plataformas digitales son los géneros acción, aventura y comedia.

La encuesta arrojó que el 42% lo hace a partir de la propuesta de los algoritmos de las plataformas, una publicidad o por los avances. Según los datos que presenta la encuesta, “el 65% de la población utilizó plataformas audiovisuales, entre las cuales Netflix es la más popular” y “el 50% paga por esa plataforma”.

 

 

La pandemia modificó prácticas

 

Otra de las líneas de análisis que se desprende es la utilización de Internet. En el 2013, “el uso de Internet estaba vinculado a estar quieto en el hogar” mientras que, con el uso masivo de celulares, “hubo una deslocalización de las prácticas culturales”. En Argentina, está extendido mirar una serie, escuchar música o leer desde los celulares.

“¿Qué pasó en los últimos diez años? Sin duda, que no es menor, una pandemia que transformó nuestras prácticas y también la forma de producir y monetizar esos consumos. Y aparecen nuevos actores claves como las plataformas. Entonces, la invitación es a pensar a partir de estos datos cuáles son y cómo intervienen”, reflexionó Houllé.

En ese sentido, Houllé indicó que “en los sectores de nivel socioeconómico alto es de un 84% y en los niveles socioeconómicos más bajos es de un 54%”.

Sin embargo, aunque el consumo a través de las plataformas ya es un fenómeno instalado, hay todavía una fuerte asistencia presencial a los eventos culturales.

“Aparece, por vía pandemia y vía pospandemia, la recuperación de la vuelta a la presencialidad, que además aparece con valores más altos que en la edición anterior”, indicó Bonazzi y se detuvo en el cine que alcanza a más de un tercio de la población. “La hipótesis de que la disponibilidad de oferta audiovisual va en detrimento, a priori, no se verifica”, remarcó.

 

 

 

 

 

 

“Los centros deportivos, sociales y religiosos son los que mayor participación alcanzan. Entonces, con este tipo de consumo podemos observar que la digitalización en muchos casos se complementa o impulsa”, acotó Bonazzi.

¿Qué aportes pueden hacer todos estos datos para comprender los cambios en la cultura en estos últimos diez años? “En principio, en términos de políticas públicas, permite indagar dónde están las brechas de acceso y la importancia del Estado para achicar esas brechas. Otra de las utilidades es visualizar los actores para entender quiénes generan los contenidos, cuántos se generan y poder reflexionar en torno a las necesidades que el Estado genera”, explicó Houllé.

Además, ejemplificó que “aunque puede haber una extranjerización de las producciones, “más del 70% de la población accedió a contenidos argentinos a través las plataformas”.

 

 

 

 

 

La encuesta se presentará con mayor profundidad el 2 de junio en el marco del Mercado de Industrias Culturales (MICA). “Tener por primera vez la posibilidad de ver qué pasaba hace diez años y qué pasa hoy resulta fundamental para tomar decisiones y comprender de manera cabal este mundo”, sostuvo al finalizar la presentación el ministro de Cultura.

 

Bauer: “Datos para tomar decisiones”

Tristán Bauer señaló que “el desafío nuestro, el de cada día, es como construimos un mundo que sea más democrático y más solidario. Manejar estos datos y, por primera vez, esta comparación que podemos hacer, qué pasaba hace diez años, hace cinco años, qué pasa hoy, nos resulta fundamental. Datos para tomar decisiones y para comprender de manera cabal este mundo. Lo que aparece es la digitalización de las plataformas. Este mundo, esta cultura digital que ha surgido”.

“Es asombroso -añadió el marplatense- lo que estamos viendo en estos tiempos, como la digitalización de la imagen y la irrupción reciente de la inteligencia artificial, que todo lo cambia y que todo lo modifica con una celeridad asombrosa y como convive lo vivo con la cultura digital. En ese desafío estamos nosotros”.

 



Por su parte, Julia Houllé explicó que “la Encuesta de Consumos Culturales es una política pública que, en esta tercera edición, cumple diez años de historia. Empezó en el 2013 el primer relevamiento y se presentó en el 2014 y luego en el 2017. Hoy, con el relevamiento del 2022, estamos completando una serie de tres años que nos permite ver un mapa de los consumos culturales en los últimos diez años.

Para celebrar esto hay que pensar que es un Estado produciendo información sobre el entorno en el que se encuentra y a eso me permito agregar que, en estos últimos tres años, generamos un sistema de información de datos integrados a partir de registros administrativos, lo que fue un crecimiento muy grande”.

Te puede interesar

Cargando...
Cargando...
Cargando...