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La Ciudad 28 de abril de 2016

Los Caldera vuelven a ser noticia: choque y discusiones en la vía pública

Guillermo, que cumplió condena por el crimen de Bárbara Tiscornia, chocó en su moto contra dos autos en Colón y La Pampa. Se quebró una pierna y, junto con su padre, quiso evitar el traslado al hospital.

Guillermo Caldera, condenado por el crimen de Bárbara Tiscornia y ya en libertad, chocó hoy en su moto con dos autos en la avenida Colón a la altura de la calle La Pampa y luego, junto a su padre Jorge (se lo había acusado de abandono de persona seguido de muerte y fue absuelto), quiso evitar ser trasladado al hospital y protagonizó incidentes en la vía pública.

Según pudo saber LA CAPITAL, Guillermo Caldera se desplazaba en moto sin casco y sin carné de conducir por Colón cuando, al llegar a la intersección con La Pampa, en circunstancias que se tratan de establecer colisionó con dos autos. Por el impacto, salió despedido y por la caída se fracturó una pierna.

Pese a la grave lesión, su primera reacción fue negarse a ser trasladado al hospital. En esa negativa contó con la colaboración de su padre, que no tardó en llegar al lugar. Pero entre los dos no lograron su cometido y poco después Guillermo fue derivado a un centro asistencial.

La policía secuestró la moto y la Fiscalía de Delitos Culposos abrió actuaciones por el delito de “lesiones culposas”.

También dispuso que Guillermo se someta a un test de alcoholemia y se realice muestras de sangre y orina.

El 22 de abril de 2003 Bábara Tiscornia (20) fue asesinada por Guillermo Caldera de un disparo en el rostro durante un encuentro que pretendía ser íntimo dentro del departamento de la familia del asesino, en La Perla.

En 2005, a Caldera se lo confinó a 13 años de prisión pero luego su pena fue reducida a 10 y desde hace casi dos años se encuentra con la condena agotada. Se lo había encontrado culpable del asesinato, pero también de llevar el cuerpo hasta un acantilado y arrojarlo, con la intención de confundir a la policía, ya que en aquella época se habían producido algunos crímenes de mujeres cuyos cadáveres aparecieron en la zona de Camet.

A Jorge Caldera se lo acusó de haber llegado al departamento cuando aún la joven estaba con vida y de no hacer nada para ayudarla, pero en el juicio que se celebró en septiembre pasado fue absuelto.