CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
Deportes 25 de noviembre de 2020

Los primeros gritos sagrados

Maradona debutó en la red en el estadio General San Martín. Diego tuvo su bautismo de gol en Mar del Plata, el 14 de noviembre de 1976. A los 16 años marcó por duplicado para Argentinos Juniors en un 5-2 ante San Lorenzo de esta ciudad. Aquella inolvidable tarde, contada por protagonistas y testigos.

El primer gol de Maradona con una foto precisa de LA CAPITAL desde atrás del arco.

Mar del Plata fue escenario de las primeras conquistas de Maradona. El 14 de noviembre de 1976, en el desaparecido estadio General San Martín, el joven prodigio marcó dos goles en el 5-2 de Argentinos Juniors contra San Lorenzo de esta ciudad.

Con 16 años recién cumplidos, Diego jugó aquel día su quinto partido oficial. Ingresó en el inicio del complemento y marcó el cuarto y quinto gol del equipo de La Paternal a los 42 y 45 minutos.

La víctima fue Rubén Lucangioli, cuya carrera quedó marcada por aquellas conquistas. “No me desagrada que se acuerden de mí por goles que me hicieron. Esos goles me los hizo Maradona, el mejor jugador del mundo, ¿cómo me va a poner mal eso?”, dijo años después el mítico arquero de Mar del Plata, hoy fallecido.

Uno de los dos representantes de la ciudad en el Nacional ’76 -el otro era Aldosivi- cerraba la tabla de posiciones de la Zona D con apenas un triunfo en once presentaciones. Por eso, apenas 1.335 espectadores fueron testigos de un momento histórico.

 

El técnico interino de Argentinos, Jorge Enrico, decidió que la joven promesa arranque en el banco de suplentes. El primer tiempo terminó 1-1.

Después entró un joven con la camiseta “15” en la espalda que cambió el trámite del partido. “La expectativa que había creado la actuación de Maradona tuvo rápida confirmación. En su primera intervención dio muestras acabadas de su tremenda habilidad e inteligencia. Un toque sorpresivo y el marcador desairado. Alrededor de él, Argentinos Juniors comenzó a tener el dominio del balón” , escribió Segundo César Cheppi, en el comentario del partido publicado por LA CAPITAL.

En su primer gol, Diego esquivó a tres rivales, cedió para Hallar y convirtió cuando recibió la devolución: fue un zurdazo cruzado y bajo. Poco después, Maradona aprovechó un centro de Ingaramo y colocó la pelota junto al palo derecho del arco local.

El segundo gol de Diego ese día.

El segundo gol de Diego ese día.

Los reporteros gráficos Ismael Daoud y Néstor Alfonso captaron en fotos esos momentos históricos, de los que no hay registros fílmicos.

Alejandro Edelmiro Mascareño, símbolo de San Lorenzo, recordó esa tarde con una linda anécdota: “Siempre recuerdo que ese día el entrenador Benicio Acosta me dijo ‘es una vergüenza que un ‘borrego’ venga a bailarlo a usted'”.

Otro prestigioso periodista, Juan Carlos Morales -tres años después cubrió su primer título en el Mundial Juvenil-, también asistió a aquella tarde especial. “En un partido lento e impreciso, apareció Maradona y dio una lección de fútbol hábil e inteligente. Bajo su comando, y con la eficacia de Álvarez, Argentinos concretó un abultado triunfo (…) El local decayó anímicamente en los últimos 10 minutos. En ese lapso, Maradona trasladó a la red su dominio en el juego”, fue su síntesis para “La jornada está aquí” de El Gráfico.

Otra jugada de aquella tarde.

Otra jugada de aquella tarde.

El miércoles siguiente Horacio Pagani publicó en el diario Clarín su famoso artículo “Un sueño de barrilete”. Allí contó que guardaba el diario LA CAPITAL como una reliquia y que estaba feliz por los goles y por un caño que le hizo a Mascareño.

Maradona tuvo en Mar del Plata su bautismo de gol ante San Lorenzo, una de sus víctimas preferidas: cuatro años después, en 1980, le marcó el gol número 100 de su carrera.