Una de las primeras cosas que tendrá que, además de festejar, claro, será modificar su perfil de Instagram, en cuya descripción podía leerse “3x campeona mundial”.

Ahora, Lucía “Luchy” Cosoleto tendrá que cambiarlo a “4x campeona mundial”.

Porque la notable surfista argentina, a los 29 años atraviesa un momento sublime en su carrera deportiva. Y este domingo, en una definición increíble, se coronó por segunda vez campeona mundial al ganar el título en el APP World Tour Gran Canaria Pro Am, corona que consiguió por segunda vez en la división SUP Surf.

Este logro se suma, además, a los dos títulos mundiales que también acredita en el ámbito de la ISA (la Asociación Internacional de Surf). El póker de consagraciones le hace estricta justicia a una deportista que dedica su vida a mejorar, perfeccionarse, entrenar y, obviamente, a ganar.

Cosoleto nació en Buenos Aires, pero la mayor parte del poco tiempo al año que pasa en su país, se instala en Mar del Plata.

El año 2025 ha sido increíble para ella, ya que se consagró campeona sudamericana, ganó el ALAS Global Tour y, por aquellas cuestiones del juzgamiento, perdió por centésimas la chance de ser campeona de la ISA en El Salvador, pocos días atrás.

La resolución del Gran Canaria Pro Am tuvo, si se quiere, una especie de revancha por aquella final que se le escurrió en Surf City. Para muchos, el puntaje que merecía aquella última ola de la peruana Vania Torres, no alcanzaba para superar la sumatoria de Luchy. Pero los jueces le otorgaron a la incaica la cifra que necesitaba, y el título fue para esta última.

En esta final en Las Palmas de Gran Canaria, la película parecía que iba a tener el mismo final. Torres lideraba la batería final a menos de 3 minutos para el epílogo y tras encadenar una serie de maniobras en una muy buena ola. Detrás suyo, “Luchy” concretó un magnífico “top turn” que se ganó aplausos y gritos desde la orilla, aunque cuando intentó su segunda maniobra, trastabilló y fue al agua.

@si_crowther
Luchy Cosoleto en acción en la batería final. Logró el título gracias al puntaje de su última ola.

Casi no le quedaba tiempo para buscar el desquite y fue por una última ola con buen potencial. Pero la japonesa Kaede Inoue tenía prioridad y Luchy tuvo que abortar.

Mientras, Vania Torres preparaba el festejo. Sin embargo, todavía no se había ingresado el puntaje de la última ola de la argentina. Necesitaba 6,07 puntos para pasar de cuarta a primera. Tan radical fue esa única maniobra que los jueces la premiaron con un 7,67 más que suficiente para redondear la sumatoria final de 12,94 puntos, sinónimo de campeonato.

En la entrevista posterior a su consagración, Cosoleto señaló: “Estoy realmente muy contenta. No lo podía creer, porque durante el heat no escuchaba nada, no sabía nada. Sólo que no había podido agarrar buenas olas en los primeros 15 minutos de la batería, así que me dije: ‘OK, vamos a surfear’. Y sí, ¡lo hice!

Acerca de la última ola, reconoció que “me di cuenta de que había sido una muy buena ola, pero realmente no sabía si me iba a alcanzar para quedar primera. Sentí que no había entregado mi mejor surfing, pero en esa ola intenté dar lo mejor que tenía”.

Por último, también expresó que al salir del agua no tenía idea de que era la campeona y se sorprendió. “Cuando salí del agua, pensé que había sido un evento complicado para todos, por las condiciones. Pero igual estaba feliz, por haber estado compitiendo en la manga final con las otras chicas. Y de pronto mi entrenador y mis amigos me dijeron que había ganado. ¡No lo podía creer!”.

En el cierre, envió un mensaje para sus afectos: “Gracias a mi familia, en unos días los veo. Hace mucho que no estoy en mi casa. Agradecer también al Enard, a la ASA, a mis entrenadores en Mar del Plata, Naty (De la Lama), Tavo (Montes de Oca) y Juan (Baldino), y a todos los que me apoyan siempre”.

El podio femenino en Las Palmas de Gran Canaria, con la argentina en el escalón más alto.