El gobierno de la Provincia de Buenos Aires determinó este martes que Mar del Plata y Batán deben retroceder a partir de mañana en el esquema de fases y pasar a la 3 para tratar de frenar el incremento de contagios de coronavirus y evitar un colapso en el sistema sanitario.

El anuncio estuvo a cargo del jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, en el marco de la conferencia de prensa sobre la situación epidemiológica que compartió con el ministro de Salud, Daniel Gollan, en el Salón Dorado de la Gobernación.

De acuerdo al sistema de la administración de Axel Kicillof, en la fase 3 la restricción horaria para bares y restaurantes comienza a las 23 y la del resto de los comercios a las 20, mientras que la circulación de personas y actividades no esenciales se mantiene a las 0.

Además, se prohíben las actividades y reuniones sociales en domicilios particulares, salvo para la asistencia de personas que requieran cuidados especiales; la actividad en bingos y casinos, la de las bibliotecas y los mercados y ferias de artesanías o alimentos en espacios cerrados.

También se suspenden las actividades deportivas colectivas con o sin contacto, al aire libre o en espacios cerrados, en la que intervengan más de 10 personas.

Por su parte, otros rubros deberán funcionar con aforo reducido. Los natatorios no podrán recibir a más de 10 personas al mismo tiempo y los bares y restaurantes deberán funcionar en el interior con una asistencia del 30%, lo mismo que los gimnasios, los shoppings y los museos.

Por su parte, a los eventos culturales, sociales, recreativos o religiosos en espacios públicos al aire libre no podrán asistir más de 30 personas, cuando la fase 4 permitía hasta 100.

“Lógica regional”

Bianco mencionó la intención de trabajar con “una lógica más regional” para la implementación de medidas de cuidado. Ejemplificó con Bahía Blanca y Mar del Plata. “En muchos casos hay efectores públicos o privados de salud que están cerca de una situación de colapso o con un altísimo nivel de ocupación. Lo que nos dicen los intendentes es que no tienen problemas en pasar de fase 4 a fase 3 para reducir la circulación, pero que también necesitan la solidaridad de los distritos vecinos” que derivan a sus pacientes a las cabeceras sanitarias, reveló.

En ese plano, General Pueyrredon quedó en fase 3 como ya lo estaban Balcarce y General Alvarado. “Estamos empezando a trabajar en coordinación con todos los distritos una lógica más regional. Lo hemos hecho con Bahía Blanca y lo estamos trabajando con Mar del Plata y su zona de influencia”, insistió Bianco.

En fase 3 hay esta semana 45 municipios. “Muchos municipios han pasado. Lo que hicimos fue actualizar los datos que determinan el pase de fase 4 a 3 y esa actualización nos ha mostrado que hay una serie de distritos en donde en las últimas semanas han aumentado los casos”, dijo el funcionario.

Indicó que, si se comparan los contagios de la última quincena con los de la anterior, “se ha generado un incremento importante de la incidencia de casos”. “Lo hemos hablado y consensuado con todos los intendentes para que pasen a fase 3”, destacó.

“Estamos haciendo una sintonía muy fina con todos los intendentes de la provincia, demostrando ante algunas críticas que hemos tenido en el pasado que somos flexibles”, agregó.

Bianco subrayó que este sistema “es dinámico” y “se va actualizando”, por lo que “se puede trabajar con un nivel de detalle mucho mayor de acuerdo a las conversaciones, diálogos y consensos con los intendentes”.

De hecho, la fase 3 de hoy es distinta a la que rigió en Mar del Plata desde fines de agosto hasta principios de noviembre del año pasado, cuando se suspendieron las actividades deportivas y recreativas (salvo las caminatas a 500 metros del domicilio), la obra privada, la gastronomía en los locales, los gimnasios y los shoppings.

“Las medidas de cuidado tienen como objetivo reducir lo más posible la circulación de personas, sobre todo en las áreas más densamente pobladas y en aquellas zonas geográficas que tienen un mayor grado de aumento de los contagios en las últimas semanas”, definió Bianco.

“La mejor forma de evitar contagios y muertes más allá del proceso de vacunación es bajar la circulación y reducir los contactos entre las personas”, acotó.

El ministro de Salud, Daniel Gollan, resaltó que “son medidas que se están tomando para preservar la vida de la gente”. Y si bien puntualizó que el promedio de ocupación de camas en el interior “es del 50%”, en muchos lugares “está al 100%” y se están trasladando pacientes a centros de salud cercanos.