El obispo Gabriel Mestre alentó a la ciudadanía a seguir el ejemplo de la Selección Argentina de fútbol y “trabajar en equipo y con humildad” en todos los ámbitos de la vida.

En su saludo de fin de año con los medios de comunicación, el obispo Mestre sostuvo en la sede de la Diócesis de Mar del Plata que “en este fin de año en las vísperas de la celebración de la Navidad y con la alegría del Mundial ganado en nuestro corazón, hacemos este brindis, pidiendo de manera particular por los medios de la ciudad de Mar del Plata y de la zona, de la Diócesis de Mar del Plata y Necochea y de otros lugares, agradeciéndoles la posibilidad de que a lo largo del año hayamos podido compartir las cuestiones que tienen que ver con la comunicación. Siempre que los hemos convocado han estado presentes, para las cosas buenas, que son muchas, y para las complicadas y difíciles también, para las que hay que dar explicaciones también”.

Con las emociones aún en lo más alto, Mestre hizo referencia al campeonato mundial obtenido por la Selección Argentina de fútbol y se animó a trazar un paralelismo con la vida misma. “Tenemos la alegría en nuestro corazón del Mundial -dijo-, que nos ayude a jugar juntos en el equipo de la vida y que este testimonio de la Selección de trabajo en equipo lo podamos llevar a todos los ámbitos de la vida y en Mar del Plata en particular, con el ejemplo y la compañía del ‘Dibu’ Martínez”.

Al respecto, agregó que “hay que tomarlo como algo positivo el Mundial, realmente nos ha hecho bien a todos nosotros. Tenemos que tomar el ejemplo del trabajo en equipo. Yo no soy especialista en fútbol, pero lo escuché de los que saben esto del trabajo en equipo y que es humilde. Uno lo escucha hablar a Scaloni, a Messi y emociona realmente. Si lo aprendiéramos todos, cuánto bien nos haría. Trabajar en equipo, asumir y tener presente nuestras diferencias, pero superar la grieta, como vimos en los festejos el domingo, y disfrutar esto de que sabemos superar las grietas cuando queremos”.

Luego, volvió a enfocarse en los representantes de la prensa y dijo que “tanto yo como último responsable de la Diócesis, el padre Luis, Adrián y el resto, les agradezco profundamente y les pido que Dios los bendiga a ustedes, a su familia, a cada equipo de trabajo, sabiendo que la tarea y el servicio de la comunicación no tiene días ni horario, no hay feriados, no hay días de frío, de calor. Hay que estar ahí, en tantas circunstancias que reclama la comunicación y eso es verdadero esfuerzo y como sociedad lo tenemos que agradecer siempre. Muy feliz Navidad y feliz Año Nuevo, que va a ser intenso para ustedes porque es año eleccionario en nuestra querida patria”.