El Centro de Arte y Ciencia (CEAC) de la UTN Mar del Plata presenta la Muestra #16 de la galería MIJO para su temporada 2023.

En este caso se trata de “La posibilidad de una muestra” una exposición del artista marplatense Leonardo Salvini comisionada por Yamandú Rodríguez. La inauguración será este viernes 15 de diciembre a las 19:30 en el segundo piso de la sede de la UTN – Buque Pesquero Dorrego N° 281.

La galería MIJO se encuentra activa desde el año 2010 siendo escenario de artistas locales y residentes en otros países. Las condiciones de producción de MIJO se inscriben en una pared franca de 10 metros de largo y 3 de alto, en la que cada artista decide el tipo de tratamiento, técnica y perspectiva para realizar sus proyectos.

Artista Autodidacta, Leonardo Salvini interviene en Arquitectura. Cursó sus estudios en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de Mar del Plata, en las carreras de Diseño Industrial y Arquitectura. Dibuja, construye y muestra desde el año 2000.

“La posibilidad de una muestra” está realizada con hierro, chapa, líquen, plástico, vinilo, agua de mar al 30 %, pintura acrílica y lápiz.

Dos planos de bordes sinuosos avanzan de la pared a diferentes alturas. La superficie (territorio) de uno de ellos está colonizada por un líquen. En el otro, se materializa el borde con una acumulación. Dos paisajes planos que no son una mancha, se comportan como ecosistemas capaces de colonizar casi todo, y con una gran capacidad para sobrevivir a condiciones extremas.

“Un liquen tradicionalmente se define como un holobionte conformado por un hongo (micobionte) y una o varias poblaciones fotosintéticas de algas o cianobacterias (fotobiontes). Los líquenes son unos impresionantes organismos que se unen en un ejemplar movimiento simbiótico. Esta obra se trata de contemplar ese movimiento. Estos organismos son capaces de colonizar casi todos los ecosistemas que se conocen y nos pueden ayudar a conocer mejor las condiciones en las que se encuentra nuestro entorno, ya que funcionan como un bioindicador. Tienen un punto débil, y es que son muy sensibles a muchos contaminantes como el dióxido de azufre, el amoniaco, materiales radiactivos y ciertos fenómenos como la lluvia ácida. Por lo que, en general, cuantos más líquenes encuentres en un sitio más limpio estará el aire y el agua de ese sitio” indicó el autor.