CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
La Ciudad 8 de febrero de 2021

Murió un enfermero del SAME y lo despidieron como pidió, con sirenas de ambulancias

Mario Castillón, histórico trabajador de la Secretaría de Salud, superó el Covid y murió a los 61 años a raíz de complicaciones cardíacas. Conmovedora despedida sus compañeros en la puerta del cementerio de la Loma.

Imágenes: @dronmardelplata

“Si algo me pasa alguna vez, vengan a despedirme en ambulancia”, había pedido a sus colegas tiempo atrás el enfermero del SAME Mario Castillón, quien tras estar en la primera línea de fuego contra la pandemia desde el primer día, falleció en las últimas horas a los 61 años y sus compañeros cumplieron con una sentida despedida y un “sirenazo” en las puertas del cementerio.

El profesional fue un histórico y querido trabajador de la Secretaría de Salud de la Municipalidad de General Pueyrredon, siempre al pie de la emergencia y con plena vocación de servicio, según destacaron sus allegados.

El año pasado Mario Castillón contrajo coronavirus y logró vencer a la enfermedad a pesar de sus problemas de salud preexistentes. El virus lo encontró trabajando activamente para asistir a marplatenses en los inicios de la pandemia y tras recibir el alta siguió en la primera línea con un compromiso aún mayor.

Este lunes, horas después de producirse su fallecimiento -a los 61 años- a raíz de complicaciones cardíacas que recientemente habían derivado en una intervención quirúrgica realizada en una clínica de la ciudad, decenas de sus compañeros fueron a brindarle una sentida despedida, tal como había pedido en su momento.

Según pudo saber LA CAPITAL, el enfermero del SAME sufría de problemas cardíacos que se agravaron luego de atravesar el coronavirus. Hace poco había sido operado, permaneció en terapia intensiva y no logró superar esta vez la batalla por salir adelante.

Esta mañana, varias ambulancias se apostaron en las puertas del cementerio de la Loma, en Almafuerte y Alem. El personal del SAME hizo sonar las sirenas para despedirlo a lo grande, como Mario Castillón alguna vez les había pedido.

El personal de salud acompañó a su familia y respetuosamente se apersonó frente al cementerio, donde ahora descansan sus restos. Las sirenas sonaron fuerte en la breve ceremonia que conmovió a los trabajadores y familiares presentes.