Una pareja compuesta por un joven de 23 años y una mujer de 20 fueron demorados y apenas notificados de una contravención por no querer abonar el taxi. Claro que la trama oculta en esta historia surge de aquel objeto que el hombre guardaba entre sus prendas de vestir y que simulaba ser un arma de fuego.

El procedimiento lo llevó a cabo personal de la comisaría decimosexta luego de un pedido de auxilio de un taxista en la zona de Gutemberg y Tetamanti, pleno barrio Las Heras. Los policías al localizar al vehículo cuyo chofer había emitido una señal de alarma hizo descender a los dos pasajeros.

El taxista relató que desde hacía unos minutos los jóvenes lo estaban haciendo dar vueltas, yendo de una casa a un cajero automático para, supuestamente, extraer dinero. Pero al ser requisados por la policía ninguno de los pasajeros tenía consigo documentos o una tarjeta bancaria.

Lo que sí encontró la policía al revisar el asiento trasero del taxi fue un tubo metálico cromado de aproximadamente 15 centímetros de largo, doblado en el extremo y con cintas a modo de modo de cachas. Además poseía un interruptor que al accionarse simulaba el martilleo de un arma de fuego.

De acuerdo a versiones que circularon en el ámbito policial, en los últimos días se habían producido algunos asaltos a taxistas y no se descarta que esta pareja tuviera alguna relación.

Debido a que no cometieron ningún delito previsto por el Código Penal solo se les labró una contravención en el Juzgado Correccional Nº 4  a cargo del juez Pedro Hooft.