En procura de promover la actividad diurna, los comerciantes impulsaron un novedoso proyecto que será tratado por el Concejo Deliberante dentro de 15 días.

La propuesta, denominada "Alem de día", contempla la construcción de edificios bajos -planta baja y edificaciones que no superen los dos pisos- donde puedan funcionar consultorios, oficinas y bancos. Claro que primero deberá producirse el traslado de los bares a la escollera Norte.

"Queremos que Alem sea como Güemes, una zona con mucha actividad comercial donde convivan desde restaurantes y locales de ropa hasta hoteles y lugares de entretenimiento para los más chicos", explicaron los comerciantes del sector.

La iniciativa, que tiene el visto bueno del gobierno local, fue recibida con los brazos abiertos por los vecinos del barrio, que están en pie de guerra con los propietarios de los bares por los ruidos molestos y los excesos de los jóvenes en la calle. "No queremos el caos de ahora. Todo lo contrario: pretendemos que vuelvan las familias y que Alem se transforme en una zona tranquila", dijo a LA CAPITAL Enrique Mucciarelli, apoderado de Sacoa, uno de los impulsores de la idea.

Reunión con autoridades

Acompañado por un grupo de funcionarios del Gobierno, el presidente del Concejo Deliberante, Marcelo Artime, encabezó la semana pasada una reunión con los comerciantes para tratar el tema. Entre las alternativas analizadas figuró que la Municipalidad permita la construcción de edificios bajos.

Del encuentro también participaron el subsecretario de Planeamiento Urbano, Carlos Rodríguez y el concejal de Acción Marplatense, Leandro Laserna. Por el sector comercial, en tanto, estuvieron Mucciarelli, Juan Bauzá, Cristian Ladonaj, Juan Boubée, Jean D?Abreu, Lisandro Puceta y Alberto Procelli, en representación de firmas con más de 25 años de actividad, como "Fortín", "Farmacia Bauzá" y "Sacoa Entertainment", entre otras.

En la reunión se analizaron las distintas herramientas con que cuenta la comuna para apoyar la conversión de Alem. "Todos estuvimos de acuerdo en que no se busca construir torres ni mucho menos propiciar la nocturnidad", sostuvo Artime. "Por el contrario añadió-, se está hablando de indicadores parecidos a los que rigen para Güemes u Olavarría y que está probado que fomentan un perfil netamente diurno".

Una calle de servicios

La intención de los comerciantes es que Alem se convierta en una calle de servicios. "Nuestro deseo es que, además de restaurantes y negocios de ropa, puedan funcionar oficinas, consultorios médicos y entidades bancarias", coincidieron. La tradicional calle está poblada, en su mayoría, por bares y pubs. Aunque, en menor medida, también hay espacio para otros rubros. Desde parrillas, locales de indumentaria y heladerías hasta cafeterías, pancherías e inmobiliarias.

A futuro, el proyecto contempla el ensanche de las veredas para que los turistas tengan más espacio para pasear. La idea es copiar el estilo fashion de la tradicional calle Gorlero de Punta del Este.

En ese sentido, Artime afirmó que "Alem no volverá a ser la que fue hace 30 años ni tampoco puede seguir siendo la de la actualidad". Y enseguida agregó: "Por eso es que creemos que debemos trabajar para que sea más parecida a Güemes".

Para los comerciantes, Alem se encuentra "frente a un oportunidad histórica que debe ser aprovechada", originada en la expansión de la ciudad hacia el sur, el "desborde" de la calle Güemes y el proyecto ya en marcha- de construir una terminal de cruceros en la escollera Norte.

"Alem tiene que convertirse en el paseo obligado de las familias que viven en el sur de Mar del Plata y de los pasajeros de los barcos que bajen por dos horas en la ciudad", reflexionaron los impulsores del proyecto. Y anticiparon que están en proceso de constituirse en una asociación formal, con su correspondiente personería jurídica.

Artime confirmó que volverá a reunirse con los comerciantes el próximo martes a las 9 de la mañana para avanzar en la iniciativa. Por estas horas se definirá si el proyecto de ordenanza es presentado por el intendente Gustavo Pulti o por el bloque de concejales de Acción Marplatense. Según trascendió, la idea es que el tema sea tratado en 15 días por el Concejo.

"Queremos que sea una calle sin caos"

"Queremos que Alem sea como Güemes y Olavarría". Ese es el objetivo central de la iniciativa que impulsan los comerciantes de la zona para cambiarle el perfil a la tradicional calle marplatense.

Enrique Mucciarelli, apoderado de Sacoa, uno de los impulsores del proyecto, explicó que buscan fomentar la actividad comercial diurna. "La intención es que Alem vuelva a ser la calle que era antes, una zona tranquila e ideal para pasear en familia, alejada del caos y el descontrol", dijo.

El comerciante se mostró confiado en que la iniciativa sea aprobada por el Concejo Deliberante. "La Municipalidad nos abrió las puertas y recibió con agrado nuestra propuesta. Esperemos que se pueda poner en marcha lo más rápido posible", sostuvo.

A tono con la postura de los vecinos del barrio, Mucciarelli reclamó el traslado de los bares de Alem a la escollera Norte. "No queremos seguir pagando las consecuencias de los pubs. Las propiedades se nos han desvalorizado y necesitamos empezar de nuevo", afirmó. Además, agregó: "La meta es volver a recuperar a Alem como en las viejas épocas y ofrecer servicios de todo tipo tanto a los marplatenses como a los turistas".

Quejas de los vecinos por ruidos molestos

Los vecinos de Alem están en pie de guerra y dicen que la zona se convirtió en "tierra de nadie" por los ruidos molestos y los excesos de los jóvenes en la calle. Además, volvieron a reclamar el traslado de los bares a la escollera Norte.

Por su parte, los empresarios de la noche aclararon que el control en la vía pública no es competencia de los comerciantes y destacaron que la actividad genera 800 puestos de trabajo.

La calle Alem nació como un paseo de compras y luego se convirtió en una zona de recreación. Hoy, con un total de 173 comercios, de los cuales 41 funcionan bajo la habilitación de café, bar, restaurante o panchería, el sector se transformó en motivo de discusión entre vecinos, empresarios y funcionarios.

Los habitantes del barrio argumentan ruidos molestos, excesos en la calle y fundamentalmente sostienen que la tranquilidad de esta zona residencial desapareció y dio lugar al descontrol. Un dato: en pleno verano, un promedio de entre 20 y 30 mil jóvenes recorren Alem cada noche. "Nuestro barrio es tierra de nadie. El frente de mi casa se convierte en baño público y en depósito de basura", se quejó Raúl, un vecino que vive hace más de 15 años en la zona.

Nueva reunión en el Concejo

El presidente del Concejo Deliberante, Marcelo Artime, respaldó el proyecto de los comerciantes de Alem que busca darle un fuerte impulso a la actividad diurna, destacó el consenso que generó la iniciativa y aclaró que la Municipalidad no permitirá la construcción de grandes torres.

"Pretendemos que Alem tenga más movimiento de día que de noche y se parezca a Güemes. Hablé con los comerciantes y coincidimos en que la actividad nocturna no debe superar el horario de la una o dos de la mañana", dijo Artime a LA CAPITAL.

El concejal de Acción Marplatense resaltó los avances en el tema tras la reunión que mantuvo la semana pasada con los propietarios de los negocios de la zona. "El martes que viene -sostuvo- nos vamos a volver a juntar para seguir tratando la iniciativa", que va a complementar el traslado de los bares a la escollera Norte. Allí, a 300 metros de su inicio y sobre el mismo flanco donde está el Inidep (Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero), serán construidos cerca de 30 locales nocturnos.

Por su parte, los comerciantes destacaron el diálogo y la buena predisposición de Artime y los funcionarios del Gobierno. "Avanzamos bastante en la reunión. Acordamos varios puntos centrales y ahora sólo resta darle el retoque final a la iniciativa", concluyeron.