River y Boca protagonizarán una nueva edición del Superclásico en el estadio Monumental y paralizarán al país futbolero a partir de las 17, en búsqueda ambos de un triunfo que alimente sus diferentes objetivos a futuro.

Para River, este Superclásico llega en la previa de la final de Copa Argentina del jueves ante Rosario Central y de ganarlo llegará entonado anímicamente a ese duelo que, además de tener un título en juego otorga nada más y nada menos que una una plaza a la Copa Libertadores de América 2017.

En cambio, para Boca conseguir los tres puntos en el Monumental significaría afirmar su levantada en el campeonato, meterse de lleno en la pelea, sumar tres victorias consecutivas y maquillar un flojo 2016.

A pesar de estar los dos con objetivos distintos, el significado del Superclásico los obliga a poner lo mejor y conseguir una alegría que los potencie.

Este partido puede marcar las despedidas de dos ídolos de ambos clubes, ya que Andrés D’Alessandro podría regresar en enero al Inter de Porto Alegre y Carlos Tevez no descartó la chance de emigrar al fútbol de China.

En cuanto a la conformación de los equipos, en River reaparecerá el defensor Jonatan Maidana, quien dejó atrás un desgarro y será compañero de zaga del ecuatoriano Arturo Mina.

Por la lesión de Milton Casco, el entrenador Marcelo Gallardo volverá a apostar en el lateral izquierdo por el juvenil Luis Olivera; en tanto que en el medio la duda está entre Gonzalo Martínez e Iván Rossi.

Después, de mitad de cancha para adelante lo previsible, actuarán Leonardo Ponzio, Ignacio Fernández, D’Alessandro, Sebastián Driussi y Lucas Alario.

En Boca, el delantero Darío Benedetto no se recuperó de su lesión y ni concentró para este duelo, por lo que Walter Bou seguirá como centro atacante.

El mediocampo volverá a tener a Fernando Gago como protagonista excluyente, después de sus buenas actuaciones contra San Lorenzo y Racing. Por los costados irán Pablo Pérez y el uruguayo Rodrigo Bentancur.

A último momento, el arquero Guillermo Sara sufrió una lesión en el hombro y dejará su lugar para que debute Axel Werner.

Otra vez un Superclásico mundial. Siempre con gran expectativa, más allá de los objetivos diferentes.