“Como un tren, el sistema de salud argentino va camino a chocarse contra una montaña, si no se hacen las modificaciones estructurales necesarias para hacerlo sustentable”. En diálogo con LA CAPITAL, el dueño de Swiss Medical Group y presidente de la Unión Argentina de Entidades de Salud del sector privado (UAS), Claudio Belocopitt, utiliza una metáfora para graficar el “colapso” que, según indica, enfrentan las obras sociales sindicales, de empresas, prepagas, sanatorios de comunidad, prestadores médicos, entre otros actores del sector.

Para el reconocido empresario las razones de este “deterioro” en la estructura sanitaria nacional está ligado, en principio, a dos cuestiones que van en aumento: el avance -veloz- de la tecnología médica y la incorporación por parte del Estado de prestaciones a Programa Médico Obligatorio (PMO), “sin analizar las fuentes de financiamiento”.

“Teniendo esto en cuenta -y que los gobiernos se tienden a ocupar solamente de las cosas que les puedan afectar en las próximas horas y no de un camino a largo plazo-, no tengo ninguna duda que si no se toman las medidas que se tienen que tomar y se hacen los cambios profundos que se requieren, el sistema de salud va a colapsar“, aseguró a este medio Belecopitt.

El empresario no atribuye la responsabilidad de esta situación a ningún gobierno en particular. De hecho, asegura: “No han hecho las modificaciones que se necesitan ni los anteriores, que inclusive agravaron las circunstancias, ni los actuales”. De todas maneras, insiste en que los cambios deben ser inminentes. “Lo vengo diciendo desde hace tiempo: esto se va a ir deteriorando sin prisa pero sin pausa, y no es una cuestión que se va a ver de un día para el otro, pero es un camino que si no se modifican las condiciones, no tiene otra alternativa u opción”, aseguró.

A los puntos advertidos como causantes principales de los inconvenientes del sector, se sumó una fuerte devaluación que impactó en la actividad, cuyos insumos son en su amplia mayoría dolarizados.

En este sentido, Belocopitt aseguró que las consecuencias del deterioro del sistema ya se perciben en obras sociales y prepagas más pequeñas. “Esto se ve más claros cuando se analiza la situación de los prestadores, que más del 50% de los prestadores a nivel país están frente a un panorama de extrema dificultad”.

Y agregó: “Muchas obras sociales y empresas medianas están corriendo el riesgo de cesación de pagos a sus prestadores. Cuando esto ocurra con una sola de ellas, por la conexión que existe en todo el sistema, se produciría un efecto cascada y se multiplicarían las organizaciones que no pueden hacer frente a sus costos fijos”.

Este panorama económico también provocó que los aumentos establecidos en las prepagas en los últimos doce meses (cerca del 42,2%, casi diez puntos por debajo de la inflación anual) no alcanzaran para solventar los costos. “En todo el mundo el aumento de la medicina está por encima de la inflación en alrededor del 7%. En Argentina está por debajo”, señaló.

Impacto

Belocopitt también destacó el impacto que un colapso en el sistema privado tendría en el público. “Los argentinos se atienden a través de la medicina prepaga, las obras sociales sindicales, las provinciales y a través del PAMI. Pero todas estas obras sociales utilizan una red de prestadores que son todos privados entonces, en definitiva, el 70% de los argentinos están atendiéndose, de una manera u otra, en el sistema privado de salud. El sistema de salud está básicamente montado sobre este sistema. Así que la generación de un problema en el sistema privado de salud hace absolutamente inviable el sistema de salud público, donde ahora no pueden atender el 30% que tienen a cargo ahora”.

En este sentido, y de cara a un año de elecciones, el empresario destacó que quienes tienen la responsabilidad de tomar decisiones deben tomar de manera urgente cartas en el asunto.

“Nosotros como empresarios tenemos la obligación de estar advirtiendo que las luces de emergencias se están prendiendo y que es necesario hacer los cambios, es imprescindible. El sistema de salud es la columna de la sociedad. El mundo ya lo ha entendido, pero la sociedad argentina no“, concluyó.