Histórico grupo coral de Mar del Plata, nacido en la década del ’90 y que entre sus logros está el haber llevado su canto hasta el Vaticano, el Coral Carmina podría desaparecer como agrupación. A las deudas que la comuna mantiene con su director, Horacio Lanci, se suma el desgaste de los mismos coreutas -alrededor de cien- que no encuentran respuestas serias a la continuidad artística del grupo.
Vale señalar que, pese a realizar una actividad ad honorem, sus miembros continúan reuniéndose todos los sábados para organizar las acciones a seguir, en el marco de un escaso interés por parte de las actuales autoridades del área de Cultura, repartición de la que depende desde el año pasado.
Así lo señaló ayer a LA CAPITAL Lanci, director de esta entidad desde que surgió, hace veintitrés años. A Lanci la comuna le adeuda el sueldo de todo el 2015. “Cuando vino la nueva gestión, desde Cultura me ofrecieron renovar el contrato, contesté que no si antes no había un plan que regularizara mi pago”, dijo ayer Lanci, quien reconoció que la deuda viene desde la gestión de Gustavo Pulti. “Siempre me pagaron con atraso, pero nunca como en este caso”, agregó. “Ahora en principio no está la decisión de realizar un plan de pago, yo no exijo cobrar la deuda ya, quiero una propuesta”.
Cabe señalar que desde 2015, el Coral Carmina es un coro municipal, ya que una ordenanza aprobada por el Concejo Deliberante regularizó la situación de esta agrupación coral.
“El texto de la ordenanza dice que ‘se declara al Coral Carmina como un coro municipal que dependerá de la Secretaría de Cultura'”, recordó el director.
Esta declaración no implicó una erogación por parte de la comuna, se encargó de detallar Lanci. “La ordenanza aseguró la continuidad del coro, es importante aclarar que los coreutas nunca han cobrado, porque es un coro amateur, la ordenanza no generó un incremento del gasto, porque siempre mi sueldo como director me lo pagó la Secretaría de Cultura”, detalló.
“Si la nueva gestión dice que no puede pagar la deuda y tampoco está dispuesta a conversar del pago, estamos en una situación ilegal”, dijo y no descartó iniciar acciones legales para dirimir esta cuestión.
Por otra parte, Lanci manifestó su preocupación por los cien coreutas que integran esta agrupación, que en estos veintitrés años tuvieron a su cargo la interpretación de notables repertorios: Carmina Burana y la Novena Sinfonía de Beethoven están entre las principales obras.
“Es un coro muy grande, se inició con ciento ochenta y cinco coreutas en el ’93 -historió-. Ahora, estos cien coreutas vienen haciendo un esfuerzo muy grande, dan su tiempo para interpretar obras que los marplatenses no podrían oír sin un coro de estas características. Esta gente sigue reuniéndose, no para ensayar, sino para discutir cuál es la mejor acción, cómo seguir, pero hay que evitar que se cansen y que se desgasten”.
Existe una Asociación de Amigos del Coral Carmina que ya pidió una audiencia con el intendente Carlos Arroyo. “Este hombre no ha contestado”, dijo Lanci en referencia al jefe comunal. “Cuando me recibió Sebastián Puglisi (secretario de Cultura) me dijo que iba a hablar con José Cano (secretario de Hacienda), pero si hay un cambio de funcionario en Cultura todo se demorará más”, reconoció y dijo que más allá de su situación personal le preocupa la posible disolución del coro. “Podemos perderlo, me parece increíble que esto esté sucediendo”.