Con el entrenador Alejandro Carotenuto y Facundo Dolce como capitán, el combinado argentino masculino Juvenil de beach handball participará del 14 al 19 de este mes del Campeonato Mundial que se realizará en Creta, Grecia.

En las mismas fechas se disputará el torneo femenino de la categoría (Sub 18), mientras que del 21 al 26 competirán los seleccionados mayores de la especialidad.

“Vamos como cabeza de serie, así que el objetivo es ser competitivos y, en principio, pasar la primera ronda. Después, hay que ver cómo se desarrolla el torneo. Clasificamos al Mundial por el subcampeonato en el Campeonato Sudamericano y luego fuimos campeones con victoria en la final ante Brasil en los Juegos Suramericanos de Rosario. Estamos con confianza. Después, el nivel entre los mejores ocho es muy parejo”, expresó Carotenuto.

Argentina integrará el Grupo D con Uruguay, Alemania y Ucrania. Los tres mejores pasarán a la siguiente instancia (arrastrarán puntos), en la que habrá dos zonas de seis. Luego, primero y segundo cruzarán en semifinales y, los ganadores, se medirán por el título.

Esta será la segunda cita ecuménica, tras el Mundial desarrollado en Islas Mauricio, en 2017: Argentina fue bronce en el torneo masculino y femenino.

Caronetuto, técnico de Once Unidos -donde juega Dolce- y la Federación Atlántica, fue designado para el cargo por Leticia Brunati, head coach de ambos planteles: la cordobesa Eliana Fortana es la encargada de dirigir a las chicas.

“Yo estuve en el seleccionado en el proceso anterior, para el Panamericano de Venezuela 2016. Y ahora me convocaron en 2019. Desde entonces venimos con un trabajo continuo, acá en Mar del Plata en Playa Verese, donde invitamos a la Selección Argentina. Hicimos una tarea de detección de talentos, buscando jugadores con determinado estereotipo físico. Y entrenamos con 50, 60 chicos, hasta que quedaron 20. Entre ellos, conformamos la lista de 10 jugadores para el Mundial”, contó Carotenuto.

Sobre el furor que causó el beach handball, lo que quedó evidenciado en Rosario, deslizó: “Es una especialidad bastante nueva, incluso a nivel mundial. Pero llama mucho la atención porque es muy atractiva El combo de los goles espectaculares, la playa y que es un deporte más distendido porque se juega con música, hace que se vea como un show. En Rosario hubo tres mil personas mirando, algo impensado para el handball”.

“Después de los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, donde las chicas se consagraron campeonas y los chicos fueron terceros, las escuelitas de beach handball explotaron“, concluyó Carotenuto, quien ahora está con el seleccionado indoor de la Federación Atlántica en Mendoza y el sábado viajará con la delegación argentina rumbo a Grecia.