La policía detuvo a seis adolescentes, de entre 14 y 18 años, acusados de haber cometido un “robo piraña” a punta de pistola el viernes a la noche a la salida del Club Quilmes. Dos de los involucrados son menores no punibles que ya habían sido aprehendidos esta semana por haber participado de otros robos violentos y, ante esta situación, desde el Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil piden mayor compromiso para su contención.

Tres menores fueron las víctimas de este nuevo robo piraña. El viernes a la noche habían ido al Club Quilmes -Luro 3800- y, al salir a la vereda en unos segundos fueron rodeados por al menos seis adolescentes quienes, a punta de pistola, les quitaron sus pertenencias y huyeron corriendo del lugar.

Las víctimas se subieron a un taxi, quien los ayudó a llamar a la policía para dar el aviso y a perseguir a los jóvenes delincuentes que se habían separado en dos grupos: uno fue por la avenida Luro y otro intentó perderse cruzando la plaza.

Uno de los grupos fue detenido por personal de la comisaría primera en la puerta del bingo frente a esa dependencia, en Independencia y Rivadavia. El otro, gracias a la descripción dada por las víctimas, fue aprehendido a unas tres cuadras del lugar, mientras los adolescentes simulaban esperar un colectivo.

En poder de los aprehendidos fueron encontradas las pertenencias de las víctimas y el revólver utilizado en el asalto, que la policía luego constató que no tenía balas.

La causa quedó a cargo del fiscal del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil, Walter Martínez Soto, ya que entre los involucrados hay dos de 14 años, tres de entre 16 y 17 y uno de 18, apenas mayor de edad. El fiscal ordenó la detención de los seis adolescentes a quienes imputó por “robo doblemente agravado por haber sido cometido en poblado y en banda y por el uso arma de fuego”.

El fiscal Martínez Soto informó a LA CAPITAL que solicitará medidas de contención para los dos menores inimputables quienes, según explicó, esta semana ya habían sido aprehendidos por haber participado en otros delitos violentos pero que, justamente por su edad, la Justicia de Garantías liberó a las pocas horas de su arresto.

“Este hecho se pudo haber evitado con mejores medidas de contención del Estado, no hicieron lugar a las medidas pedidas, hace falta un marco de contención más serio, con mayor compromiso”, reflexionó el fiscal Martínez Soto.