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San José Obrero, San Pablo Paz

Valioso empate 1-1 en cancha de Atlético Mar del Plata. Gran labor del arquero Pablo Paz, la figura del partido.

Por Juan Miguel Alvarez

San José jugó casi al límite de sus posibilidades y consiguió una valiosa igualdad como visitante de Atlético Mar del Plata, 1 a 1, en el inicio del torneo Clausura del fútbol marplatense. El esfuerzo colectivo y las atajadas de Pablo Paz fueron los argumentos más importantes de la visita para hacerle frente a un decano que, por intensidad y peso específico, inclinó la cancha a su favor en el complemento.

El equipo de Damián Herald hizo un trabajo encomiable mientras le aguantó el físico. Presionó la salida rival, corrió mucho en el medio y se plantó con firmeza en su última línea, liderado por Mecoli. Sin demasiadas variantes ofensivas, buscó permanentemente a Fabián Insaurralde, quien siempre le dio un destino correcto a la pelota, acompañado por un sacrificado Jorge Zanetti.

“El Negro” tuvo la más clara de su equipo, pero Acquisto le adivinó la intención.

Atlético estuvo inseguro desde el primer pase. Si bien Laino y Grande intentaron cambiar el ritmo, faltó conexión con los puntas. Con poca participación, Molinelli generó peligro: su potente derechazo provocó la primera y quizá más espectacular tapada de Paz.

San José, más cómodo con el desarrollo, se puso en ventaja por un penal convertido por Favre.

Pero la visita ya no aguantó el ritmo en el complemento. Y se defendió cada vez más cerca de su arco.

Atlético sí mantuvo la intensidad y, pese a no atacar con prolijidad, logró desequilibrio por los costados tomando riesgos: Grande se convirtió en el cuarto delantero, volcado por la izquierda. Molinelli remató al cuerpo de Paz y Collantes perdió una situación increíble de cabeza tras un buen centro de Grande.

El gol estaba al caer. Y llegó tras un centro de Collantes conectado, de cabeza, por Agüero.

Atlético siguió atacando y San José defendió como pudo el empate. Lo sustuvo gracias a Paz, quien tapó otro remate a “quemarropa” de Grande y, ya sobre el epílogo, fue clave con dos atajadas bárbaras: voló para sacar un tiro libre de Laino y, en la continuidad de la jugada, le sacó un mano a mano de corta distancia a Collantes.

Casi el mejor San José igual necesitó de una gran tarde de su arquero para salir airoso del choque contra un Atlético que no mostró su mejor versión pero que estuvo más cerca del triunfo.

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