La cantidad de homicidios registrados en Mar del Plata y Batán descendió en los últimos tiempos. Y, en esa línea, también bajó la cifra de asesinatos ocurridos en ocasión de robo. De hecho, hace pocos días se cumplieron tres años del último crimen cometido con la participación de un menor en el marco de un asalto.

Se trata del que tuvo como víctima al testigo de Jehová, José Miguel Carricaburu, sucedido en enero de 2015. En ese entonces, uno de los delincuentes que lo mataron tenía 17 años.

Fuentes del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil confirmaron a LA CAPITAL que desde aquel hecho no volvieron a investigarse casos de robo con víctimas fatales. Y lo consideraron un progreso en la situación que les tocó afrontar a los fiscales del área, Walter Martínez Soto, Mariana Baqueiro, Carlos Russo y Marcelo Yanez Urrutia, quienes asumieron en sus cargos en 2008.

El fuero se creó hace exactamente una década, como consecuencia de la grave situación delincuencial en la que estaban implicados jóvenes de entre 16 y 18 años. Entre 2015 y 2018, sin embargo, los crímenes en los que estuvieron incriminados menores estuvieron vinculados a ajustes de cuentas o violencia intrafamiliar, pero ninguno a casos de asaltos.

El crimen de Carricaburu

El crimen de José Miguel Carricaburu ocurrió el sábado 4 de enero de 2015, durante un asalto cometido en plena calle por dos delincuentes que circulaban en una moto. El caso comenzó siendo investigado por el fiscal de mayores, Eduardo Amavet.

Sin embargo, luego de que se descubriera que estaba incriminado un adolescente de 17 años, la causa pasó a manos de la fiscal Baqueiro. El cómplice del sospechoso, mayor de edad, fue aprehendido en el marco de dicha investigación.

Y días después del hecho, la policía allanó una casa de Punta Mogotes en la que vivía el menor, pero no lo encontró en el lugar. Por eso, pasó a ser considerado prófugo hasta que él mismo se presentó en Tribunales con su abogado particular.

Tras ello, quedó detenido y su identidad no se difundió. Sin embargo, la Cámara de Apelaciones lo benefició al dictarle el arresto domiciliario mientras estaba bajo prisión preventiva y el joven cumplió el régimen del que gozaba hasta enero de 2017, cuando escapó de su casa tras los festejos de Año Nuevo. Luego, al poco tiempo volvió a ser atrapado en una vivienda del barrio Juramento.

Informe

En septiembre de 2017 un informe de la Procuración General de la provincia de Buenos Aires reveló que en los últimos tres años bajó en un 26 por ciento la participación de menores en los delitos.

Según esos datos, en 2014 se iniciaron en Mar del Plata y la zona 228 procesos penales contra jóvenes de 16 y 17 años, mientras que en 2016 fueron 167.

La mayoría de los jóvenes acusados de cometer delitos en el departamento judicial de Mar del Plata son varones argentinos que atentan contra la propiedad privada.

Los datos pertenecientes al Registro de Procesos del Niño (RPN) que presentó en La Plata el procurador general de la Provincia, Julio Conte Grand, dieron cuenta además de una disminución gradual de la participación de menores en la comisión de delitos, tanto a nivel local como provincial.

En ese sentido, el informe detalló que entre el 1 de enero de 2014 y el 20 de julio de 2017 se iniciaron en Mar del Plata 667 procesos penales contra jóvenes de 16 y 17 años.

Los datos presentados en el edificio de la Procuración General de la Suprema Corte evidenciaron un descenso de la participación de niños y adolescentes en los delitos.

Así, mientras en 2014 se iniciaron en la ciudad y la zona 228 procesos, en 2015 fueron 202 y en 2016, 167; es decir que entre 2014 y 2016 disminuyó en un 26,7 por ciento el porcentaje de menores que delinquieron.

Mar del Plata concentraba al momento de la presentación del informe el 5,4 por ciento del total procesos penales juveniles iniciados en la provincia de Buenos Aires. Según los datos del Registro, el 95 por ciento de los jóvenes procesados en la región eran varones, todos argentinos.

El 77,5% cometió delitos contra la propiedad; de ese total, un 28,6% fue por robo agravado con uso de arma. El RPN creado por la Ley 13.634 tiene como objetivo central “la acumulación y control de continuidad” de los procesos pendientes seguidos a jóvenes en el Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil. El Registro se nutre de información brindada por jueces, agentes fiscales y defensores de ese fuero.