El joven de 25 años acusado de haber asesinado a Franco Correa (20) en el barrio Parque Hermoso se negó a declarar este lunes y continuará detenido en la Unidad Penal 44 mientras avanza la investigación.

Jesús “El Chulo” Goycoolea es el principal sospechoso de haberle disparado a Correa con una escopeta el lunes en medio de una confrontación y desde el miércoles se había mantenido prófugo hasta que finalmente el domingo se entregó a la Justicia.

Este lunes por la mañana, personal del Servicio Penitenciario trasladó a Goycoolea desde la Unidad Penal 44 de Batán a Tribunales, para que, acompañado de un defensor oficial, declarara ante la fiscal Andrea Gómez, quien le comunicó que está imputado por “homicidio agravado por el uso de arma“.

Por recomendación de su abogado defensor, “El Chulo” se negó a declarar ante la fiscal, guardó silencio y prefirió no contar absolutamente nada, ni siquiera dar otra versión de los hechos.

Goycoolea seguirá detenido en la Unidad Penal 44 de Batán mientras la fiscal avanza con la investigación y evalúa, durante los próximos 15 días, si solicita o no la prisión preventiva para el único imputado por el crimen de Correa.

El ataque contra Correa sucedió el lunes a la tarde en el barrio Parque Hermoso, en calle 206 y 3, cuando según la investigación varias personas confrontaron por antiguas diferencias. En medio de esa disputa Correa recibió el disparo de escopeta en el pecho y los agresores se dieron a la fuga.

En ese momento había muchos testigos -además de los jóvenes que participaban de la gresca- porque a poca distancia de allí funciona uno comedor infantil.

Al ver que Correa estaba herido de gravedad sus allegados llamaron al 911 y cuando llegó un patrullero decidieron llevarlo hasta el HIGA sin esperar a la ambulancia.

La policía abrió camino y Correa ingresó con las severas lesiones directamente al quirófano. Ante el cuadro clínico extremo, con alto riesgo de muerte y afectación directa a los pulmones, los médicos recurrieron a la asistencia mecánica respiratoria. En los días siguientes no mejoró la condición de Correa y el sábado se confirmó su fallecimiento.