El proyecto, que lleva casi seis meses en el Concejo, busca que los usuarios puedan utilizar diferentes líneas en un mismo viaje sin abonar dos veces la tarifa. El tema renovó las tensiones vinculadas al transporte entre el oficialismo y la oposición. ¿Qué posibilidades de que se aplique?
En la Comisión de Movilidad Urbana se reanudó este lunes el debate en torno al proyecto del Frente de Todos que propone implementar en la ciudad el boleto combinado de colectivo, una iniciativa que lleva seis meses estancada en el Concejo y volvió a generar tensiones entre el oficialismo y la oposición.
Entre diferencias y acuerdos, el expediente quedó en comisión, aunque con un nuevo pedido de informes a la Subsecretaría de Movilidad Urbana. Ya estaba pendiente una respuesta del área, a la que ahora se le agregó una consulta referida al impacto que podría tener en las empresas de colectivo el incremento de los subsidios previsto por el Gobierno nacional en el Presupuesto 2023.
El objetivo de la iniciativa de Vito Amalfitano que desde abril permanece en la Comisión de Movilidad Urbana, es que mediante la tarjeta recargable SUBE se permita a los usuarios utilizar diferentes líneas de colectivo en un mismo viaje sin necesidad de abonar dos veces la tarifa.
En general, el oficialismo y la oposición coinciden en que el boleto combinado sería una herramienta útil y positiva para los usuarios. El problema, en este caso, es la manera de implementarlo.
Vito Amalfitano, concejal del Frente de Todos.
Para Vito Amalfitano, autor del proyecto, “hay una necesidad imperiosa” de contar con este “elemento virtuoso” y su aplicación “puede ser rápida a través de un mecanismo electrónico” y “sin estaciones de transbordo faraónica como proponía el pliego” que el Ejecutivo envió al Concejo el año pasado, el cual finalmente no fue aprobado.
Por su parte, el presidente del bloque oficialista, Agustín Neme, ratificó la postura del gobierno de Guillermo Montenegro sobre este tema: “El boleto combinado era una estrategia incorporada en el pliego que discutimos el año pasado y no se lograron los consensos necesarios”.
El concejal de aclaró que “es una decisión del Ejecutivo” implementar el boleto combinado, pero no de cualquier manera, sino “dentro del marco correspondiente, que es el pliego”.
Agustín Neme, presidente del bloque Vamos Juntos.
En ese sentido, Neme dijo que el gobierno municipal “sigue trabajando” y “ultimando detalles” en torno al nuevo pliego de transporte público de pasajeros, pero dejó entrever que su elevación al Concejo seguiría demorándose, sobre todo por el “difícil contexto económico del país”, pero también por “la crisis inédita del transporte público a lo largo y ancho del país” y la puja por los subsidios.
Por su parte, el presidente del bloque de Acción Marplatense, Horacio Taccone, expresó su apoyo a la oportunidad de implementar el boleto combinado a través de este expediente del Frente de Todos, más aún si la herramienta también estaría incluida en el nuevo pliego. “Es ahorrar tiempo”, dijo.
“Un boleto combinado nos haría tener un mejor servicio. Lo ideal sería que esto esté contenido en el nuevo pliego, pero si el pliego se va a demorar, nos tenemos que sincerar e implementar el boleto combinado porque es bueno para los vecinos que utilizan el colectivo”, analizó.
El tema, como se deslizó, no es nuevo. El proyecto se presentó en abril pero sobre el boleto combinado se viene debatiendo desde mucho antes.
De hecho, durante el tratamiento del pliego el año pasado el problema no era incorporar o no el boleto combinado, sino la ventana temporal en que podría utilizarse. Es decir, el tiempo que se le otorgaba al usuario para bajarse de un colectivo y tomar el otro con el mismo boleto. El pliego proponía una hora, pero a partir de un pedido del bloque radical ya había acuerdo para incrementarla.
Ahora el debate tampoco es si implementar o no la combinación entre líneas. Alude a si es posible hacerlo más allá de lo que ocurra con el pliego. A diferencia de lo que sostiene el Frente de Todos, para Juntos por el Cambio es impensado desunir una cosa con la otra.
El oficialismo se aferra a que la instrumentación requiere de los cambios de recorridos, mientras que para el Frente de Todos se trata de una herramienta “virtuosa” que, con o sin nuevo pliego, requiere voluntad política y cambios en el sistema electrónico de SUBE para aplicarlo y que los vecinos puedan combinar colectivos pagando un solo boleto, como ya ocurre hace tiempo en otras localidades del país.