CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
La Ciudad 4 de agosto de 2017

Taberna Baska, un clásico de 57 años que cerró por no poder sostener los gastos

Su dueña asegura que la eliminación de los fines de semana largos y la suba de los impuestos fueron el combo letal para uno de los restaurantes más emblemáticos del puerto de la ciudad.

El dolor de María Teresa se percibe en su voz. Repasa con nostalgia los recuerdos que supo acumular en la Taberna Baska, cuando con solo ocho años sus padres encararon el proyecto que hoy, 57 años después, cierra sus puertas. “No fue nada fácil. No es nada fácil“, se corrige Teresa mientras cuenta las razones que la llevaron a tomar la decisión.

Taberna Baska. Recuerdo 2

Teresa junto a su padre, en la puerta de la Taberna.

“En este último año, se cortaron los fines de semana largo, no hay congresos como había antes, que hacían que la ciudad se moviera, y los impuestos diarios aumentaron demasiado; fue muy difícil sostenerlo. Los que me ayudaron a mantener un poco la situación fueron los proveedores y el Sindicato de Gastronómicos por mis empleados”, señaló a LA CAPITAL la última García de Andoín que llevó adelante el local.

Ubicada en la esquina de 12 de Octubre y Bermejo, la Taberna ganó su lugar entre los establecimientos de mariscos y pescados más visitados del puerto de nuestra ciudad. Con recetas traídas del otro lado del Atlántico, condición que se mantuvo hasta su cierre, el lugar puso como prioridad la calidad de sus platos y la cercana relación con sus clientes.

Si bien en casi 60 años de trayectoria el emblemático espacio sufrió diferentes avatares económicos, el sufrido en el último fue, en palabras de su actual dueña, “diferente”. “Fueron diferentes, nada que ver ahora. Cuando uno puede al menos sostener una situación, lo mejor que puede hacer es no endeudarse más y esperar hasta que llegue un momento mejor. Pero acá la situación no dio para más; cuando la situación no da para más, no da para más”, subrayó Teresa.

Pese los inconvenientes, señaló que “tomar la decisión no fue nada fácil. No es nada fácil. Me enfermé en estos días, de hecho. Me enfermé mal”, aseguró, en un intento de poner en consecuencias físicas el difícil camino que transitó hasta este jueves, día en el que, con una publicación de Facebook a la madrugada, avisaba a su comensales más habituales que la historia llegaba a su fin.

“Queridos clientes y proveedores, les comentó que dadas las circunstancias después de 57 años Taberna Baska cierra sus puertas. ¡Todo tiene un principio y un fin! Agradezco al personal por su labor ardua. Gracias a todos por estar a lo largo de nuestra trayectoria y compartir momentos inolvidables”, señalaba el escrito.

La mención a sus empleados no es casual, Teresa los tiene presente, sobre todo a aquellos que hace varios años que la acompañaban. “Con los empleados mantuve una conversación privada. Me senté y les conté la verdad, algo que ellos ya sabían porque lo veían todos los días. No es que yo les contaba algo que no era o alucinaba, era la realidad. Es la realidad que está sucediendo”, confesó.

En cuanto a la situación general de los comercios del Puerto, Teresa sostuvo: “No sé lo que le pasa a los demás, pero los comerciantes del Puerto también les está costando. Ellos están con la Ucip y tienen que también hacer malabares para vender”.

Recuerdos de una historia

María Teresa aseguró que guarda consigo las fotos que relatan la historia de la Taberna, muchas de las cuales fue compartiendo con sus seguidores en la página del local. Sin embargo, indicó que no le hace falta volver a esa imágenes para pasear por los recuerdos, sus propios clientes y empleados colaboran todos los días.

El recuerdo más lindo es el de los empleados, todas las generaciones que han pasado por la Taberna. Yo tengo una página donde la gente escribe y sube las fotos y el apoyo que recibí de toda esa gente fue asombroso. Yo tengo los mejores recuerdos de este lugar, yo llegué acá con ocho años así que todos se imaginarán que tengo para contar muchas historias”, señaló.

Gracias a toda la ciudad de Mar del Plata que me está apoyando con mensajes y llamados y a clientes de todo el país que se comunicaron conmigo. De verdad, muchas gracias“, concluyó.