Arte y Espectáculos

Teatros de mar y de río

Por Raúl “Bigote” Acosta

Especial para La Capital de Mar del Plata

Durante la temporada de verano en Mar del Plata y de invierno en Rosario se produce un fenómeno parecido y diferente. Parecido, porque es una reacción ante el aluvión porteño de espectáculos tratando de juntar dinero a como de lugar, diferente porque cada ciudad reacciona a su modo. La actividad cultural local trata de sobrevivir a las invasiones bárbaras.

Los premios Estrellas de Mar ( que ojalá sigan, no los tercericen en manos privadas, que no los “porteñicen”, si los tercerizan y “porteñizan” que conserven su carácter independiente del relumbrón de los canales de tevé porteños y sus negociados de prensa y taquilla) juntan, cada año, más de 250 inscriptos. Un alto porcentaje es de producción marplatense. Teatro Independiente que no se rinde. Músicos. Una competencia que dignifica a la ciudad y fastidia a los corruptos que pululan, queriendo distorsionar y formular un premio tramposo que no han conseguido. Que ojalá no consigan putrefactar.

El teatro independiente apuesta al texto, a la puesta, al trabajo cooperativo, al mensaje. Es, en si, un mensaje de trascendencia social. El teatro independiente se preocupa de lo que pasa antes que de las entradas que, debido a lo que cuenta, recaudará.

Cuatro muestras de ése teatro marplatense, en cuatro domingos consecutivos, se presentaron en Rosario. El último el 1º de julio. Tita, Los Cuatro Evangelios, Benilda y Manzi la vida en Orsai, estuvieron en el Teatro La Comedia, el teatro oficial de la Municipalidad de Rosario. Fueron invitados por la Secretaría de Educación y Cultura de la Municipalidad. Ayudó, haciéndose cargo de algunas estadías, la Secretaría de Turismo de Rosario.

Pasajes conseguidos por empresas marplatenses que decidieron colaborar. Un emprendimiento marplatense privado y oficial de la ciudad rosarigasina, donde toda la prensa ayudó asociándose a la información. Comunicando sin costo.

La promesa es la visita, en 4 días de setiembre, de conjuntos rosarigasinos, el río hacia el mar. También teatro independiente.

El punto en cuestión es la supervivencia de aquello que sobre 1960 conformó el inicio de una forma distinta del espectáculo. El teatro independiente. El pulmón antes que el empresario teatral que, sin culpas y honestamente, quiere ganar dinero enfrentado por los que, con entusiasmo, con vehemencia y también honestamente, quieren contar algo sin pensar primero en el dinero.

Se deja constancia que se puede, por detrás de los olvidos y las distracciones, realizar un encuentro teatral en el que lo importante es el teatro – en el río como en el mar- . La gestora privada marplatense fue la colega Carina Badino.

Milagritos del Siglo XXI de los que siempre es bueno hablar. Hablando se entiende la gente. Los espectadores, los actores. Los empresarios. También (ojalá) las autoridades. Todas. El teatro no tiene partido político. Tiene historias. Relatos. Así en el río como en el mar. Sucedió. Que se repita.

 

Te puede interesar

Cargando...
Cargando...
Cargando...