La Secretaría de Transporte y Tránsito de la Municipalidad de General Pueyrredon manifestó “gran preocupación” porque no habrá controles en la noche navideña, debido a la retención de tareas de los trabajadores municipales por la discusión paritaria.

Las mismas falencias en los servicios esenciales que se padecen por estos días podrían traer consecuencias más graves en un par de días. Las características de los festejos de Navidad, con gran cantidad de jóvenes al gobierno de vehículos en horas de la madrugada, consumo de alcohol mayor a un día normal y uso indiscriminado de pirotecnia, generan gran preocupación en las altas esferas comunales.

El intendente Carlos Arroyo, que llegó a la gestión con el antecedente de “mano dura” en cuestiones de tránsito, verá cómo la ciudad puede transformarse en un caos vial. Es que ahora se confirmó que no habrá controles en una de las noches en las que mayor cantidad de autos con resultado positivo de alcoholemia se registra: la madrugada navideña.

Para un operativo normal en Navidad se necesitan “cerca de 20 personas” que se encargan de llevar a cabo los controles en diferentes puntos, generalmente concurridos, de la ciudad. Este año, por la retención de tareas de los trabajadores municipales, “no hay personal” para que estos puedan realizarse.

Guardias mínimas

Fuentes oficiales confirmaron a LA CAPITAL que “sólo habrá guardias mínimas en caso de emergencias o accidentes”. Si se produce un choque, se realizará la alcoholemia correspondiente y regirá la Tolerancia Cero establecida.

Desde Tránsito pidieron a los marplatenses “máxima precaución” y “apelar a la conciencia” a la hora de consumir alcohol.

“Tenemos que rezar para que no pase algo, estamos muy preocupados”, manifestaron. Y pidieron recordar: “Uno tiene que ser consciente que el auto es un arma y que el alcohol al volante, mata”.

Si bien aseguran que lo ideal sería que “la gente respete las normas y no maneje si tomó, aún sabiendo que no habrá controles”, la actitud de los conductores desde la retención de tareas alerta a los funcionarios.

Así, explicaron: “Muchas veces vamos a una escuela a hacer un control y esperan que nos vayamos, para volver a estacionar en doble fila. El centro de la ciudad está intransitable. La gente sabe que no está el estacionamiento medido y estacionan en cualquier lado. Sabemos también de la existencia de los grupos de WhatsApp en los que avisan dónde habrá controles. Y ni hablar de las picadas, que cuando llegamos al lugar ya no están porque alguien les avisó que estábamos cerca. Somos hijos del rigor. Es todo un caos”.

Respecto a los dichos de Arroyo, quien no descartó salir junto a su gabinete a trabajar en las calles de la ciudad durante nochebuena y Navidad, recordaron que “ya lo ha hecho” y “podría repetirlo convocando a personas de la guardia”.

Se espera que, tras la reunión conciliatoria en La Plata del STM el próximo jueves, se llegue a una solución para “automáticamente diagramar el operativo para Año Nuevo”.

En cuanto al consumo de alcohol, se supo que los agentes de Inspección General que habitualmente controlan la comercialización nocturna no lo harán, como tampoco habrá tareas para contrarrestar la venta ilegal de pirotecnia.