Marcelo Tinelli pateó ayer el tablero y generó un nuevo cimbronazo en la dirigencia del fútbol al bajar su candidatura a la presidencia de la AFA y renunciar a su cargo de vice tercero para focalizarse “en el armado” de la Súper Liga, a la que consideró un “proyecto superador”.
Tinelli esgrimió “razones de índole personal” para justificar su decisión, pero se despachó con tácitas críticas al manejo actual de la AFA al desear en un futuro una asociación en “orden, profesionalidad y eficiencia”.
Por su parte, el presidente de la entidad, Luis Segura, admitió desde los Estados Unidos que están haciendo “todo al revés” y convocó a los dirigentes a una reunión de urgencia de Comité Ejecutivo para el miércoles.
Tinelli, quien compitió con Segura en las elecciones de AFA de 2015 en las que terminaron empatadas, sería el primero de los dirigentes de los clubes “grandes” que forman parte del Comité Ejecutivo que renunciarán a sus cargos.
Hoy, su ladero y actual tesorero de AFA, Matías Lammens, haría oficial su alejamiento de la entidad y la semana próximo lo harían Daniel Angelici (secretario general) -impulsor del virtual “golpe de estado” institucional del que fue objeto la AFA la semana pasada-, Rodolfo D’Onofrio (vice primero) y Víctor Blanco (secretario de selecciones nacionales).
“Por razones de índole personal he decidido retirar mi candidatura para las elecciones a Presidente de @afa”, publicó Tinelli en su cuenta de la red social Twitter.
Desde esa misma cuenta agregó que renuncia de manera “indeclinable al cargo de vice-presidente tercero de @afa, para el que fuera designado oportunamente”.
El conductor televisivo y vicepresidente de San Lorenzo, que es uno de los referentes del grupo de dirigentes que está enfrentado a la actual conducción y a Hugo Moyano y Claudio Tapia, avisó que seguirá “trabajando en @SanLorenzo y en el armado de un proyecto superador en el fútbol, como creo que es la SuperLiga”.
“Ojalá en el futuro tengamos una @afa con orden, profesionalidad y eficiencia”, disparó.
Tinelli era uno de los cinco aspirantes a conducir la AFA, junto a Moyano, Tapia, Nicolás Russo y Armando Pérez.
El nuevo sacudón en AFA encontró al presidente Segura rumbo a los Estados Unidos, desde donde se expidió al respecto e informó que luego del partido del lunes de Argentina ante Chile en la Copa América regresará al país.
“No se puede negar la importancia que tienen los clubes grandes para el fútbol argentino. Por eso espero que el miércoles vengan todos los clubes (reunión de Comité), todos los responsables, y se busque una salida. Lamentablemente estamos ante dos posiciones que están divididas por una grieta importante. Ojalá encontremos la forma para que el fútbol retome el camino del orden”, expresó Segura.
Y agregó: “Para lo que la Selección necesita estamos haciendo todo al revés. Vine para colaborar y resolver temas pendientes con el técnico y los jugadores. Y el miércoles analizaremos la situación de AFA, que es difícil y cada día se complica más. Los jugadores se están matando para quedarse y nosotros nos estamos matando por diferencias que parecen irreconciliables. Tienen que sentarse los interesados a ver cómo se arregla esto”.
En tanto, la semana próxima llegarán al país emisarios de la FIFA y Conmebol para interiorizarse sobre el aterrizaje de veedores de la Inspección General de Justicia en la entidad.
El italiano Primo Corvaro será el hombre enviado por FIFA y estuvo involucrado en los últimos conflictos institucionales de las federaciones miembro, por lo cual viene visitando Latinoamérica en meses recientes, por caso la Federación Portorriqueña de Fútbol, cuando evitó la destitución de su presidente Eric Labrador.
En tanto Monserrat Jiménez, la directora jurídica de Conmebol, también estará en la sede de calle Viamonte.
En la virtual “intervención” de la AFA,y “jugando con fuego”, Mauricio Macri y el gobierno nacional impulsan a la legisladora porteña Graciela Ocaña para integrar una supuesta mesa “normalizadora”.
Segura y el sector que apoya al tándem Moyano-Chiqui Tapia considera esa medida como una intervención, algo que impide por el estatuto de la FIFA.
Así lo expresa en una extensa nota de siete páginas que redactó el abogado Damián Dupiellet en nombre de Segura, que fue remitida a cada uno de los miembros del Comité Ejecutivo para luego enviarlas a Gianni Infantino a Zúrich y a Alejandro Domínguez, a Luque, presidentes de FIFA y Conmebol, respectivamente.