Enmarcado en el programa La Costa Vida, la Municipalidad de La Costa completó un ciclo de formación en maniobras de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) y en la utilización de desfibriladores automáticos que se destinó a trabajadores de distintas áreas del gobierno local, y que contó con la participación del intendente Juan Pablo de Jesús.

Fue en el hall de la Municipalidad de La Costa donde el personal se reunió para recibir la instrucción que dictó el director de Defensa Civil, Augusto Giachetti, quien ahondó en la forma de utilización del desfibrilador que se encuentra instalado en el primer piso del edificio, además de explicar el paso a paso de las maniobras de reanimación.

Dentro de esta serie de capacitaciones a empleados municipales, se desarrollará un segundo encuentro este viernes, para que otro grupo de trabajadores esté en condiciones de actuar en una situación de emergencia aplicando RCP y haciendo uso del desfibrilador.

Según contó Giachetti, durante el año pasado, cuando se dio inicio a La Costa Vida, se capacitó a más de 5 mil personas en RCP. De este modo, se acompañó la instalación de desfibriladores en múltiples instituciones educativas, culturales y deportivas de toda La Costa para convertirlas en zonas cardioprotegidas.

El Programa Municipal La Costa Vida 

Desde el año pasado el intendente Juan Pablo de Jesús puso en marcha este programa que apuesta a la prevención y al cuidado de la salud de los vecinos equipando con desfibriladores externos automáticos a distintos espacios públicos como clubes, escuelas, centros culturales, polideportivos y centros de jubilados, entre otras instituciones.

La instalación de los DEA está acompañada por las capacitaciones que ofrece el área de Defensa Civil, donde además de instruir sobre el funcionamiento del moderno aparato, se explica cómo llevar adelante las maniobras de reanimación.

Estos modernos desfibriladores permiten controlar con una descarga una arritmia cardíaca letal. Son una tendencia mundial que cuenta con una moderna tecnología y diseño que lo hace más sencillo en su uso.

En Argentina se producen alrededor de 40 mil muertes súbitas al año y el 70% ocurren fuera de los hospitales: en el trabajo, en clubes, en lugares públicos e incluso en la calle. La única forma de salvar esas vidas es aplicando en forma rápida y eficaz medidas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y desfibrilación.