Una niña de cuatro años que padecía autismo fue hallada muerta en el río Hillsborough, ubicado en la localidad de Tampa, Florida, luego de que propia madre la ahogara.

Al parecer, en la tarde del jueves, policías fueron alertados sobre movimientos extraños cerca de ese río y luego fueron informados sobre que una mujer que ahogada a un menor en el río y unos minutos después. Minutos después, llegó un equipo de buceo y tras treinta minutos de intensa búsqueda, dieron con el cuerpo de la niña.

En ese mismo momento, la pequeña fue trasladada al Hospital Saint Joseph, donde intentaron reanimarla sin poder lograr su cometido. La niña fue declarada muerta.

Gracias a los testimonios de los denunciantes, detuvieron a Shakayla Denson, quien sería la madre de la víctima en cuestión. La sospechosa de 26 años cometió el crimen tras robar un auto Nissan Altima gris que estaba en reparación en un taller de reparación y escapar a pie de la escena.

De acuerdo con los relatos de los testigos, Denson estacionó el auto y sacó por la fuerza a Je’Hyrah -quien viajaba en la parte trasera- arrastrándola de un brazo, se metió con ella al río y la ahogó a varios metros de la orilla, sentándose un momento en el pasto antes de huir.

Esta mañana, la madre de la víctima y sospechosa del crimen de su hija, compareció ante un tribunal por homicidio premeditado en primer grado, abuso infantil agravado y robo, sin derecho a fianza por los primeros dos cargos.

Aunque hasta el momento se desconoce el motivo del asesinato, se encontró que hace nueve meses, Shakayla había creado una campaña de recaudación de fondos para poder pagar el tratamiento especial que necesitaba su hija Je’Hyrah, que padecía autismo.