Por Sebastián Arana

No pudo Unión con el ascendente Sarmiento de Junín. El equipo marplatense perdió claridad en un final de mucha paridad y un rival más sereno, y apoyado en la jerarquía de Julio Mázzaro, se impuso 83 a 77 por saber cerrar este juego correspondiente al Torneo Federal de Básquetbol.

Salió un primer tiempo jugado de igual a igual. Con cambios permanentes en el marcador, con alternancias en el dominio. Sarmiento comenzó un poco mejor con el gol exterior del interminable Mázzaro y con una buena carga de rebote ofensivo. Y Unión reaccionó cuando pudo correr. Con las picantes asistencias de Nacho Fernández y las definiciones en velocidad de Jara o Rivero. Una vez que el equipo local asimiló ese mejor arranque de Sarmiento, manejó todo el primer cuarto una estrecha diferencia y lo terminó ganando 22-21.

La aparición de las rotaciones en escena benefició a Sarmiento en el segundo parcial. Para los dirigidos por Norberto De Paz fueron un problema sin solución las situaciones de “puerta de atrás” definidas por Rodrigo Acuña (hermano del “Toro” Roberto, el pivote de Peñarol en la LNB), autor de 12 de los 18 puntos de Sarmiento en el segundo parcial.

Con esa aparición, más un rato de nerviosismo de los locales -se fueron en discusiones con los jueces-, el equipo juninense sacó una máxima luz de seis puntos (35-29) cuando restaban cuatro minutos.

Pero regresaron los titulares “celestes” -Franco Rivero, particularmente, en muy buen nivel-, afirmaron la defensa y Fernández entregó algunas asistencias con su sello. Conclusión: Unión se fue al descanso 40-39 arriba.

El equipo marplatense tuvo su mejor momento promediando en el tercer cuarto. A esa altura, Fernández, con su habilidad para controlar la pelota, provocó una sucesión de faltas en sus marcadores. D’Angelo, por caso, salió por cinco personales. Sarmiento, entonces, fue el que se fue en discusiones. Y Unión estuvo letal desde la línea para aprovechar los foules o las técnicas. Así escapó a 52-44. Pero los juninenses revivieron con dos triples de Márquez contra el “cajón y uno” que los locales intentaron para neutralizar a Mázzaro.

La paridad volvió entonces al juego. Unión ingresó al último descanso 61-59 al frente. Entonces pasó un momento de zozobra. Su ofensiva se “secó” y apenas anotó dos puntos en tres minutos y medio. Sarmiento volvió a tomar la delantera. No por mucho. Pero el equipo “celeste” pasó a correr siempre de atrás a un rival que lo tuvo a Mázzaro muy confiable en el último segmento.

El veterano neuquino aportó once puntos en un escenario final de muchos nervios. Sarmiento fue más lúcido en la recta final que un equipo local que, equivocadamente, no atacó ni a Mázzaro ni a Rodrigo Acuña, ambos con cuatro personales, en esos minutos epilogantes. El propio Acuña estiró a un inalcanzable 77-72 el marcador a 34” para el final. El triunfo se lo llevó el más inteligente.