En el día de ayer se conoció que Victoria Xipolitakis había efectuado un llamado al 911 a causa de una situación de violencia de género en su domicilio, donde vive junto a su marido Juavier Naselli y el hijo recién nacido de ambos, Salvador Uriel.

Ante el caso, el audio del llamado donde la mediática denuncia el hecho se había filtrado: “Estoy con un bebé y tengo un demente. Quiero se lo lleven”. Si bien la modelo negó que Naselli haya recurrido a la violencia física si solicitó que lo retiraran del domicilio: “Por violencia verbal, porque es un loco. Quiero que se lo lleven, por favor”.

Luego del episodio, Vicky se mostró molesta porque se haya dado a conocer su llamado y explicó: “No me arrepiento de llamar a la policía, pero son un desastre”, sostuvo mientras se dirigía al pediatra con su hijo en brazos.

“Hay cosas que no tienen vuelta atrás pero ojalá se solucionen por el bebé. Lamento que esto haya trascendido. No me siento en riesgo”, aseguró Vicky, quien agradeció el apoyo de su familia y manifestó que su marido “tiene un buen corazón y tenemos personalidades distintas, yo busco la felicidad y la tengo en mis manos”.

El martes, a raíz de un llamado de Xipolitakis al 911, la policía arribó a la vivienda ubicada en la calle Marcelo T de Alvear al 1100, en el barrio de Retiro. Allí, la modelo explicó que había tenido una fuerte discusión con su marido y que quería que se fuera de la casa. Naselli se retiró del lugar por sus propios medios ante la presencia de los oficiales.

Por su parte, Moria Casan reveló detalles del episodio que desencadenó el desesperado llamado de Vicky.

“Ella acaba de ser mamá y se le dio vuelta su mundo. Y Javier, que es un señor encantador, que yo conozco, es muy estructurado, más conservador. Vicky es una explosión. ¿Y qué ha pasado con esto? Parece que hace un tiempito que él está nervioso, irritable, y eso se manifiesta con destrato verbal por la manera de ser de ella. Vicky lo está bancando por amor”, relató la conductora.

Posteriormente detalló: “Ayer (el lunes) él estaba nervioso, estaba en el cuarto y le gritó algo. Él quería comer, por ahí viene la pelea. Pero ella estaba tratando de dormir al nene en la cuna. Entonces, él va al cuarto, le pide que le abra, agarra el nene y le dice ‘entonces, me lo llevo. Me lo llevo a comer conmigo’. El chico empezó a llorar como loco. Ella empieza a llorar como loca cuando ve que agarra al bebé. Vicky le empieza a decir ‘con el nene no’. No sé si se llevó al nene a otro cuarto, pero lo sacó de la cuna. Después se lo devolvió, pero siguió insultándola, golpeándole la puerta. Entonces ella le dijo que si le golpeaba la puerta una vez más lo denunciaba, y lo de denunció”.