Se presentará nuevamente este viernes 16 de septiembre “Intersección”, una experiencia de música en vivo, sonido envolvente, visuales y diseño lumínico, creada por Juan Spano. La función será, esta vez, en el Soundroom de Chauvín, a las 21.

En esta puesta Spano interviene piezas de Spinetta y Piazzolla, llevándolas a su particular lenguaje compositivo e instrumental, combinándolas con su propia música, creando una experiencia integral que añade proyecciones y visuales de Denisse Laub, diseño lumínico de Gustavo Martincic, realización de objetos escénicos de Eduardo Bracco, actuación de Lucila Medjurechan y un ensamble de músicas en vivo integrado por Emma Chacon Oribe, Yazmin Chandia, Lupita Rodríguez, Oribe y Oriana Savino.

– ¿Qué nuevo desafío supone regresar con Intersección?

-Esencialmente la sala. En Intersección somos muy obsesivos con los detalles, cada aspecto es determinante para la vivencia profunda de la experiencia. Es una obra que requiere una logística técnica muy importante, trabajamos en interacción con una pantalla, el sistema lumínico y el sonido en 360°, por lo cual la sala en la que presentemos la obra debe contar con éstas características. El recientemente estrenado “Soundroom” de Chauvín está perfectamente equipado para que la obra pueda desarrollarse en todos sus lenguajes.

Más allá de lo técnico, una nueva presentación implica siempre ajustes musicales, esta función nos encuentra en plena grabación del material, por lo tanto, hemos trabajado profundamente cada aspecto de la partitura, no me refiero a las notas, sino lo que hay detrás de ellas, a los lugares a donde esas notas nos deben conducir.

-Desde el estreno a hoy, ¿qué cosas fuiste ajustando de la pieza?

-Eso es curioso, porque en general, en los procesos de arte escénico, la obra va tomando forma con el devenir de las funciones, se ajustan tanto detalles como cuestiones axiales. En el caso de Intersección no fue tan así, la obra nació como resultado de mis obsesiones estéticas en diversos campos, la música, la pintura, el cine, el teatro, el diseño sonoro, la luz; que son en realidad dobleces de un mismo gesto, es por eso que la obra tiene, ya desde un inicio, una identidad de sentido muy fuerte.

Por otro lado, Intersección es una obra que ocurre en vivo, por lo tanto, fuimos encontrando en cada función, pequeños detalles interpretativos que potencian la narrativa.

Esta ocasión será especial porque anticiparemos un material que hemos estado preparando para llevar la obra a las redes sociales, será la primera vez que lo mostremos en público.

Artistas que intervienen en “Intersección”.

– ¿Cómo definís Intersección? ¿Es una pieza que invita a descubrir qué temas?

-Diría que Intersección es una experiencia que combina diversos lenguajes artísticos, la música, el cine, la luz, el sonido inmersivo, etc etc. Pero definir Intersección no es una tarea fácil, esto en realidad es una consecuencia del universo de la obra. Me interesa todo aquello que escapa a las definiciones precisas, lo que no tiene una forma clara, porque siento que allí se abre una puerta hacia lo extraño. Cuando creo una obra, hay un momento del proceso en el que la propia pieza gira y nos observa, es ahí cuando adquiere cualidades de organismo vivo.

Esa criatura se presenta en el momento de la función llenando el espacio, convocándonos a su mundo onírico.
Mi deseo es que al salir, la gente sienta dentro de sí la estela de ese sueño por momentos bello, por momentos extraño.