Dirigentes del Frente Gremial Docente bonaerense aseguraron ayer que en el gobierno provincial le “cerraron las persianas” a una recomposición salarial y advierten que adoptarán una nueva medida de fuerza para exigir paritarias antes de fin de año.
Los sindicalistas se reunieron en la víspera con legisladores bonaerenses que integran la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados y presentaron un pedido formal de apertura de paritarias, mayor presupuesto para infraestructura y el rechazo de la baja en el porcentual en presupuesto para 2017 enviado por la gobernadora María Eugenia Vidal.
Tras el encuentro, los representantes docentes aseguraron que “el pedido de los docentes de reapertura de la paritaria para recomponer el poder adquisitivo perdido a causa de la inflación se contrapone con la negativa del gobierno de abrir una instancia de diálogo” y anticiparon que “habrá una medida fuerte antes de fin de año” con el objetivo de “recomponer el poder adquisitivo perdido a causa de la inflación”.
“Nos cerraron las persianas, hay un gobierno que desde el mes de agosto cuando los sindicatos exigimos una recomposición del salario y seguir discutiendo, no volvieron a hablarle a los trabajadores de la educación” y renegociar el incremento de sueldos otorgado en febrero, dijo la secretaria de Educación y Cultura del Suteba, Silvia Almazán.
En tanto, anticipo que los docentes nucleados en el Frente Gremial bonaerense participaran el 4 de noviembre de la marcha convocada por la CTA a Plaza de Mayo, para rechazar el bono de fin de año ofrecido por el gobierno y exigir la reapertura de las paritarias y definiremos una fecha al paro del frente gremial docente porque aun no hay respuesta del gobierno de la provincia”
Por otra parte, Raúl Calamante, secretario de Interior de Suteba, manifestó su preocupación por la reducción para el área educativa en el proyecto de presupuesto para 2017 y aseguro que “nos vamos con las mismas preocupaciones con las que llegamos, ni siquiera pudimos resolver la cuestión salarial de este año”.
El presupuesto prevé gastos por más de 520 mil millones y una necesidad de endeudamiento de 95.000 millones de pesos.
La iniciativa incluye, después de muchos años, una pauta destinada al aumento salarial de los estatales bonaerenses estimada en el orden del 17%.