Por Marcelo Solari

El partido tuvo un componente sentimental a raíz del esperado debuto de Nicolás Zurschmitten y Alejandro Diez, vueltos a la acción tras sus prolongados procesos de recuperación. Pero aún a pesar de recuperar a dos fichas valiosas, Peñarol sumó anoche otra frustración al perder frente a Bahía Básket, como local, por 105 a 101. Fue la quinta caída consecutiva del “milrayitas”, que volvió a fallar defensivamente y casi quedó sin chances de clasificar entre los tres primeros del grupo D del Torneo Súper 20.

Cercano a lo ideal fue el comienzo de Peñarol. Certero adelante y sin problemas atrás, con un Nicolás Gianella encendido sacó rápidas ventajas (12-2), gracias a 8 puntos de su base en poco más de 3 minutos.
La habitual intensidad defensiva del conjunto bahiense hacía agua y en el 15-6, el entrenador Sebastián Ginóbili perdió la paciencia e introdujo cuatro cambios simultáneos (sólo quedó el base Luciano Parodi).

Paulatinamente, esas modificaciones le fueron cayendo muy bien al visitante, sobre todo para recomponer el plan defensivo. Mientras, Peñarol empezaba a fallar seguido adelante y al llegar el momento de los relevos, más allá del impacto emotivo por el debut de Zurschmitten y Diez, las sustituciones no tuvieron el mismo efecto en el local y Bahía logró arrimar bastante.

Las acciones se equilibraron del todo en el segundo parcial, con una profunda caída en el nivel de juego. Las defensas impusieron su ley y a los dos les costó una enormidad anotar. Ninguno pudo ejecutar con soltura sus sitemas y las improvisaciones estuvieron a la orden, a veces con éxito y muchas otras sin él.
Gianella, mejor custodiado, no volvió a convertir, mientras el nulo aporte de Karl Cochran generaba más dudas.

Los bahienses encontraron un campo fértil abasteciendo a Anthony Johnson en el poste bajo y tomaro una leve ventaja, pero un positivo cierre de Zurschmitten, con doble y libre adicional más un triple, dejaron al local con desventaja mínima antes del final del primer tiempo.

Gianella arrancó en modo primer cuarto cuando reiniciaron el juego. El base convirtió desde todas las posiciones pero Bahía Básket respondió con un Johnson indetenible. Un prólogo de lo prolífico que resultaría todo el complemento ofensivo de ambos conjuntos. De todas formas, en ese contexto de abundante gol, no podían sacarse ventajas, hasta que Jonatan Slider realizó un salto fenomenal para intentar anticipar el enésimo pase llovido para Johnson. El escolta interceptó el balón pero en el forcejeo con el portentoso pivote estadounidense se desequilibró en el aire y cayó muy mal. La preocupación invadió a todos y el primer diagnóstico indicó luxación del hombre derecho.

Demoró un par de minutos el “milrayitas” en asumir el impacto y los sureños tomaron una cierta distancia. Pero al rescate llegó el pibe Tomás Monacchi (jugó 11 minutos casi perfectos) al empatar con un triple a la carrera (57-57) y luego el poco eficaz Cochran anotó otro tiro de tres puntos para llegar 66 iguales al último capítulo.

A esa altura, el base Luciano Parodi se iba adueñando de los ritmos y el manejo de los tiempos. Y a su visión le sumaba puntos para martirizar a una defensa peñarolense que otra vez volvió a quedar en deuda.
Dos triples seguidos de Diego Guaita, que había fallado todos sus lanzamientos, encendió una luz de esperanza para el local.

Pero entre la claridad de Parodi, siempre con el pase justo y la decisión correcta, la intesidad en ambos costados de Máximo Fjellerup y el dominante Johnson, Bahía Básket fue construyendo una merecida victoria que Peñarol se resistió a entregar casi hasta el final, beneficiado por algunos triples que no pudieron torcer el destino.

Síntesis

Peñarol (101): N. Gianella 24, J. Slider 5 (lesionado), S. Pettigrew 6, D. Guaita 6 y R. Glenn 6 (FI). N. Zurschmitten 22 (x), A. Diez 6, K. Cochran 7, A. Alloatti 9, J.M. Fernández 0, J. Valinotti 0, T. Monacchi 10. DT: Leonardo Gutiérrez.

Bahía Básket (105): L. Parodi 21, M. Fjellerup 17, J. Materán 5, H. Jasen 8 y A. Johnson 31 (FI). F. Corvalán 6, Gerson 2, S. Vaulet 6 (x), D. Bordignon 6, G. Iglesias 3. DT: Sebastián Ginóbili.

Estadio: Polideportivo Panamericano “Islas Malvinas”.
Arbitros: Javier Mendoza, Leonardo Zalazar y Alejandro Trías.
Parciales: 19-16, 37-38 y 66-66.