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Deportes 10 de marzo de 2019

Alvarado ganó un partido clave y se ilusiona con la clasificación

Venció dos a uno a Unión de Sunchales y si supera a Sol de Mayo clasificará al pentagonal.

Por Sebastián Arana

Alvarado hizo suyo un gran partido, un ping-pong infernal que pudo ser de cualquiera. Se impuso 2-1 a un Unión de Sunchales valiente y más claro. Pudo ganar por un margen superior. Y tranquilamente pudo haber empatado o hasta perdido.

En definitiva, el triunfo lo mantiene con las posibilidades intactas de clasificar al pentagonal final del Torneo Federal en una fecha final de la segunda fase que será para comerse radios, computadoras y celurares. Y lo mejor es que, gracias a los resultados de ayer, depende de sí mismo.

Hijo de las necesidades de ambos, el partido osciló entre un equipo y otro. La iniciativa fue de Alvarado, que tuvo un cuarto de hora inicial vigoroso. Dominó terreno y pelota y metió a los santafesinos contra un arco. Al minuto de juego el arquero González ya había tenido el primer revolcón para ahogarle el grito a Canuhé.

Por los costados, fiel a su estilo, el equipo marplatense lo generaba casi todo. A los 12′ González tuvo que esforzarse para desviar un centro que se metía de Gentile. Del tiro de esquina se produjo un rebote que le cayó a Bonetto en la puerta del área, recostado sobre la izquierda. El reemplazante de Depetris intentó meter el balón en el corazón del área. Pero el envío, desviado por un rival, descolocó al arquero y se convirtió en el primero de Alvarado.

Enseguida el elenco de Giganti tuvo una chance de oro para definir el partido. Pero salvaron sobre la línea un remate de Zalazar casi dentro del área chica.

Cuando Alvarado respiró, Unión de Sunchales se puso en juego. Se dio en cuenta que podía lastimar y de qué forma. La movilidad de Joaquín Molina y Palacios Hurtado, sus dos delanteros, puso en jaque a Mendoza y a Herner, que siempre jugaron mano a mano contra ellos y perdieron varias veces.

A los 17’ Molina dejó a Palacios Hurtado cara a cara frente a Degrá, pero el arquero de Alvarado tapó en gran forma. Nada pudo hacer, sin embargo, un minuto más tarde ante una “palomita” cruzada de Boasso, asistido por un centro preciso desde la derecha de Sarrautte.

Lejos de conformarse, Unión siguió atacando. Utilizando el lateral derecho de su ataque, por dónde Márquez también flaqueaba.

Por ese sector, a los 20’, se filtró Sarrautte y Degrá volvió a tapar el mano a mano. Tras cartón. Molina estuvo muy cerca con un remate de media vuelta y enseguida perdió otra gran chance, desde inmejorable posición, pateando alto luego de una inteligente cesión del moreno Palacios Hurtado.

Fueron cinco chances clarísimas en menos de diez minutos las que sufrió Alvarado. Pero la tormenta pasó cuando Herner comenzó a ganar los anticipos en el fondo. Unión ya no llegó con la misma claridad, más allá de que no resignó la búsqueda del arco rival con pelota al pie.

Alvarado, por su parte, menos confiado que al principio, intentó retomar la iniciativa. Pero las únicas soluciones se las dio Bonetto, quien antes del descanso inquietó con un remate de media distancia que pasó cerca y con un buen centro que Gentile “peinó” apenas alto.

El segundo tiempo fue igual de atractivo. Unión mantuvo la ambición y tuvo más espacios. Alvarado fue peligroso con el repunte de Molina.

Degrá, de gran noche, se exigió desviando sobre el travesaño un terrible remate de Sarrautte y, con su característica velocidad para salir a atorar, le ganó un mano a mano al ingresado Valdivia.

Del otro lado, Molina, con un pase genial, dejó mano a mano a Bonetto, cuyo toque rebote en el palo y le cayó en las manos al arquero. Y, enseguida, en una gran maniobra personal, sacó un remate cruzado que pasó muy cerca. Todo en menos de un cuarto de hora.

Siempre estuvo para cualquiera de los dos. Promediando el segundo tiempo, daba la sensación de que en cualquier momento podía llegar el segundo gol de Unión, dado los espacios que tenía y lo incontrolable de los desplazamientos de Joaquín Molina para los defensores locales.

Pero, en un contraataque, lo encontró Alvarado. Cálgaro perdió una pelota fácil y Molina filtró un buen pase para el pique de Emiliano López. Exigido, envió un centro que un defensor despejó a medias. Y el ingresado Depetris, entrando por el medio libre de marcas, cruzó un derechazo imparable para González.

El gol cambió poco. Sólo que Alvarado pudo jugar un poco más con el adelantamiento rival. Unión se dejó la piel buscando el empate. Pudo lograrlo en una brillante jugada colectiva que terminó con un remate a la carrera de Molina al travesaño con el arco vacío. Y también el equipo local estuvo muy cerca del tercero con un par de réplicas que no pudo definir Bonetto.

En definitiva, tras cuatro partidos, Alvarado logró el triunfo añorado, el que lo mantiene en carrera. Varias veces perdió puntos que mereció. Anoche se llevó todo ante el rival que más problemas le generó. Y está más vivo que nunca.

Síntesis

Alvarado (2): Degrá (9); Emanuel Urquiza (5), Germán Mendoza (4), Herner (5) y Fernando Márquez (4); Bochi (5) y Canuhé (5); Gentile (6), Bonetto (7) y Francisco Molina (7); Domingo Zalazar (4). DT: Mauricio Giganti.

Unión (Sunchales) (1): Gonzalo González (6); López Alba (6), Yuste (5), Rafael Nicola (5) y Semino (5); Sarrautte (6), Cálgaro (4), Boasso (7) y Vittarelli Góngora (5); Palacios Hurtado (7) y Joaquín Molina (8). DT: Adrián Tosetto.

Goles: en el primer tiempo, 12’ Bonetto y 18’ Boasso; en el segundo tiempo, 26’ Depetris.
Cambios: en el segundo tiempo, 5′ Matias Valdivia (6) por Vittarelli Góngora, 10′ Emiliano López (5) por Gentile, 17′ Rodrigo Depetris por Zalazar, 25′ Matías Caro por Mendoza y 41′ Diego López por Cálgaro.
Cancha: Estadio “José María Minella” (buena).
Árbitro: Fernando Marcos (6), de Bahía Blanca.