Boca, flamante campeón de la Copa de la Liga, tendrá su segundo partido decisivo en pocos días, ya que hoy decidirá ante Deportivo Cali de Colombia su continuidad o no en la Copa Libertadores, desde las 21 en La Bombonera, por la última fecha del Grupo E.

El equipo de Sebastián Battaglia depende de sí mismo para avanzar. Si gana, clasifica a octavos de final. Pero si empata el panorama se le complicará demasiado, ya que necesitará que Always Ready de Bolivia supere a Corinthians en San Pablo, un resultado poco probable. Una derrota lo dejará directamente sin chances.

De clasificar, seguramente lo hará en el segundo puesto. Salvo que Corinthians resigne puntos. En ese caso, puede quedar primero y tener un cruce, a priori, más accesible.

Si no lograr su cometido y queda tercero en el grupo, pasará al cuadro de octavos de final de la Copa Sudamericana.

Pero con el ánimo por las nubes tras la reciente consagración, en el “xeneize” hay confianza. Battaglia, que pasó en un puñado de semanas de ser cuestionado a intocable, pondrá lo mejor disponible con la excepción del colombiano Sebastián Villa, quien adeuda una fecha de suspensión de las seis que le aplicó la Conmebol.

Marcos Rojo, en cambio, ya cumplió la sanción de cinco fechas y seguramente será de la partida.
En relación a la reciente formación que dio la vuelta olímpica en Córdoba, los cambios serán dos, ya que a la suspensión de Villa se le agregó el desgarro que sufrió el lateral derecho Luis Advíncula, de manera que ingresarán Exequiel Zeballos y Nicolás Figal.