Un joven de 28 años, acusado de haber asaltado a un jubilado a fines del año pasado, cambió su fisonomía para ocultarse de la policía, pero de todas maneras fue detenido tras un allanamiento.

Según informaron fuentes oficiales, el imputado por el delito de “robo” al momento de ser arrestado había modificado su aspecto corporal, se encontraba más delgado, se había rapado y quitado todos los piercings y aros que utilizaba.

El robo ocurrió el 26 de diciembre del año pasado, cuando un hombre de 75 años denunció que un joven ingresó a su casa de Rondeau al 300, lo golpeó y le robó el celular, dinero y otros elementos de valor. La víctima sufrió un corte en la ceja de derecha y tuvo que ser trasladada en ambulancia al Hospital Privado la Comunidad.

Tras una serie de averiguaciones, el fiscal Fernando Berlingeri estableció que el sospechoso del robo era un joven que los últimos días había realizado trabajos como albañil en la zona y que, gracias a esa actividad conocía la situación de la víctima y había ganado su confianza.

Con las pruebas reunidas por la policía, como testimonios e imágenes de cámaras de seguridad, el fiscal Berlingeri solicitó a la Justicia de Garantías una orden de allanamiento y de detención, las cuales fueron otorgadas por el juez Daniel de Marco.

El domingo a la tarde, la policía allanó una casa en Alvarado y Neuquén donde detuvo al acusado, quien había modificado su fisonomía para no ser encontrado por la policía. Además, en el lugar se secuestró el celular robado a la víctima.

Por disposición del fiscal, el detenido quedó imputado por robo y fue trasladado a la Unidad Penal 44 de Batán.