En un emotivo acto y a 6 años de su naufragio, esta tarde se realizó un nuevo homenaje a los 44 tripulantes del submarino ARA San Juan.

El navío se hundió el 15 de noviembre de 2017 en las profundidades del Atlántico Sur a raíz de una serie de desperfectos técnicos, con una investigación judicial que todavía sigue en curso y por la que tanto los familiares como las autoridades exigieron mayor celeridad.

La ceremonia comenzó en el Museo del Comando de la Fuerza de Submarinos, ubicado sobre la escollera Norte, lindante a la Base Naval.

En primer lugar, Luis María Vertú, capellán castrense de la Escuela Naval Militar, realizó un oficio religioso para honrar la memoria de las víctimas.

“Como gran familia naval, queremos pedir por nuestros hombres y mujeres tripulantes del ARA San Juan, quienes en las frías latitudes de nuestro mar argentino se encuentran en vigía permanente. Tuvieron la vocación de servicio a la patria. Que el legado de los tripulantes nos inste cada día a superarnos y a dar lo mejor de nosotros mismos”, expresó Vertú.

A continuación, un nutrido grupo de familiares, oriundos de Mar del Plata y de diversas partes del país, descubrieron el nuevo monumento a los tripulantes del Ara San Juan, ubicado a pocos metros del museo. Con varios emocionados hasta las lágrimas, dejaron una ofrenda floral en memoria de la víctimas.

El monumento posee como característica saliente la hélice original de bronce que perteneció al ARA San Juan hasta 1995. Un elemento que busca otorgarle un “sentido de mayor representatividad y significancia”. También tiene placas que llevan los nombres de cada uno de los marinos.

Al homenaje asistió Jorge Taiana, el ministro de Defensa de la Nación, que habló en rueda de prensa. “Es un día de conmemoración y triste. Estamos recordando una tragedia, como la pérdida de 44 vidas en forma inesperada. Y en una serie de circunstancias que tienen una actuación judicial pendiente”, sostuvo.

El funcionario resaltó que los submarinistas “se han transformado en un símbolo no sólo para los familiares, sino para todos los argentinos por ser gente que dio su vida por la patria”.

“Creo que entristece, pero también enorgullece saber que hay compatriotas que tuvieron la voluntad y el sacrificio de arriesgar su propia vida y perderla, como en este caso, simplemente como servicio a la patria. Por defender la frontera, por hacer las tareas de vigilancia y control que se les habían establecido”, subrayó Taiana.

Frente a esta coyuntura, el ministro señaló que hay que “acompañar” a los submarinistas, “mostrar que no se los olvida y tenerlos presentes”. Y ponderó la construcción del nuevo monumento: “Una satisfacción en medio del acompañamiento del dolor”, comentó.

Taiana recordó algunas políticas de acompañamiento hacia los familiares, como el otorgamiento de unas 54 becas para los hijos de las víctimas.

“No repara el dolor, pero ayuda a que esas familias que perdieron a su sostén principal tengan un acompañamiento. Que sepan que el Estado no los abandona”, analizó.

Por otro lado, lamentó las “pocas novedades” en la causa que investiga el hundimiento del navío y recordó que la
Justicia le negó al Ministerio de Defensa presentarse como querellante. “Para mí, va demasiado lento el proceso. Todos quisiéramos que eso avanzara y finalizara lo que quede sin esclarecer”, consideró.

En la misma línea se pronunciaron los familiares durante el homenaje. “Esperemos que algún día se sepa realmente qué pasó. La deuda es de parte de la Justicia, ese es el problema. No se puede tener un hijo así, sin poder llevarle flores, sin ser enterrado”, lamentó Juan Carlos Mendoza, padre de Fernando, teniente de navío que formaba parte de la tripulación.

En tanto, Julio Guardia, jefe del Estado Mayor General de la Armada, destacó las gestiones desde el Estado para evitar que ocurra otra tragedia como la del ARA San Juan.

“La idea que tenemos es ir en búsqueda de submarinos modernos, nuevos. En ese trabajo estamos, con conversaciones diarias. Contamos con la aspiración de que intervenga la industria nacional en el proceso”, explicó Guardia.

El ARA San Juan, con sus 44 tripulantes a bordo, emitió su última comunicación en la mañana del 15 de noviembre de 2017 mientras patrullaba aguas atlánticas desde la Base Naval Ushuaia a su apostadero habitual en la Base Naval Mar del Plata.

Fue hallado un año más tarde, durante la madrugada del 17 de noviembre de 2018, a la altura del Golfo San Jorge, a una distancia de 597 kilómetros de Comodoro Rivadavia.

Además de los mencionados, del homenaje participaron el intendente Guillermo Montenegro; el presidente del Consorcio Portuario, Gabriel Felizia; el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, brigadier mayor Pedro Girardi, entre otras autoridades civiles y militares.